La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, ha expresado este viernes la "solidaridad y apoyo" del Ejecutivo a la familia del soldado Aarón Vidal López, fallecido ayer en un accidente en Irak, y ha puesto en valor el trabajo que realizan las Fuerzas Armadas en el exterior. Los restos mortales del militar llegarán previsiblemente mañana, sábado, a Valencia.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Sáenz de Santamaría ha manifestado su "sentido pesar" por la muerte del militar español y ha enviado su apoyo a "toda la familia de las Fuerzas Armadas", que "defienden por el mundo" los "valores democráticos".

Asimismo, la ''número dos'' del Ejecutivo ha deseado una pronta recuperación a los dos heridos en este accidente, el cabo Felipe Capa Medina y el soldado Jesús Ángel Alacid García, ambos con pronóstico menos grave, aunque permanecen en observación.

El soldado Vidal y sus dos compañeros heridos se encontraban en una misión de seguridad a bordo de un vehículo ''Lince'', que en el momento del accidente se encontraba detenido cerca de la entrada de la base ''Miguel de Cervantes'', en la localidad de Besmayah, cerca de Bagdad.

El siniestro ocurrió cuando un camión aljibe militar de las Fuerzas Armadas iraquíes colisionó con el vehículo español. Como consecuencia del impacto, el soldado Vidal salió despedido del ''Lince'' y fue atropellado por el camión iraquí.

Los restos mortales del soldado serán repatriados en un avión de transporte ''Hércules'' y previsiblemente llegarán este sábado a Valencia, donde tendrá lugar el funeral, según han informado fuentes del Ministerio de Defensa.

Se trata del primer militar español fallecido en misión en Irak desde la retirada de las tropas de España en la anterior operación de 2004. Desde enero de 2015, alrededor de 300 militares españoles adiestran al Ejército iraquí en su lucha contra el grupo terrorista Estado Islámico.