Dos triunfos en las primeras cinco jornadas son el bagaje del CD Tenerife tras el primer mes de competición y permiten cambiar el decorado gris con el que los blanquiazules iniciaron la Liga. Las dudas -demasiado agoreras- que acompañaban a los más pesimistas se han ido tornando por expectativas más optimistas tras comprobar cómo el equipo tinerfeño ha ido ganando partidos, pero también conquistando crédito a base de optimizar recursos futbolísticos. La tercera victoria consecutiva -segunda en Liga- llega en el momento preciso en el que Martí había avisado de que los suyos empezarían a soltarse de la presión inicial para ser un bloque más compacto. Y en Almería se pudo ver a un Tenerife valiente, dominador, fiable y con muy pocas lagunas en su juego, sabiendo amoldarse a las coyunturas que el partido iba presentando.

El Tenerife salió al verde del estadio almeriense decidido a crear problemas al rival desde el pitido inicial. Amath fue el primero en aparecer por el área de Casto y una jugada suya provocó un saque de esquina que Suso lanzó de manera magistral enviando el balón directo al palo sin que nadie lo tocara (2''). A partir de ahí, un torrente de llegadas del combinado tinerfeño fueron sucediéndose ante una sorprendida zaga local, ante la que Suso y Amath por los costados, y Lozano como delantero, acumulaban situaciones de peligro que no se traducían en gol: Suso (19''), Lozano (22''), Amath (24'') y Vitolo (30'') tuvieron la posibilidad de marcar, pero Aitor Sanz a pase de Camille tuvo una oportunidad manifiesta rematando por encima del travesaño (39''). Antes del descanso, Lozano disparó ajustado a la izquierda de la portería de Casto en otra malograda llegada.

Visto lo visto tras la insultante superioridad del Tenerife en la primera parte, era de esperar la reacción del Almería, que ajustó líneas después del receso y buscó con más orden la portería de Dani. Pero realmente se quedó en un par de fogonazos que, eso sí, estuvieron cerca de doblegar al conjunto tinerfeñista. Aún así, fue Lozano el que tuvo la primera ocasión nada más comenzar el segundo acto, pero no eligió bien y nuevamente el Almería escapó de otra llegada visitante.

Llegaron entonces varias aproximaciones muy peligrosas de los rojiblancos, principalmente en la figura de Antonio Puertas, quien en el 49'' asistió a Ximo Navarro, cuyo disparo encontró una buena parada del portero internacional venezolano. Más clara fue la que tuvo Pozo en el 54'', con un disparo alto dentro del área cuando lo tenía todo de cara para hacer el uno a cero. El Tenerife volvió poco a poco a recuperar el sitio en el campo y a sacar partido de sus balas ofensivas. Amath, discontinuo pero eléctrico cada vez que encaraba, también tuvo la suya en un cara a cara con Casto, pero el exmeta de la UD Las Palmas evitó la enésima ocasión blanquiazul (60'').

Mediada la segunda parte, con Crosas con tarjeta amarilla y arriesgando en algunas acciones, Martí apreció que el Almería buscaba la espalda de Vitolo y Aitor Sanz para provocar al mediocentro catalán, quien en su idea de evitar la expulsión abrió la puerta a varias jugadas comprometidas de los de Soriano por el centro. Crosas fue sustituido por Aarón Ñiguez y el Tenerife pasaba del 4-3-3 al 4-4-2, cerrando el pasillo central con Sanz y Vitolo cortando la vía de agua en la medular tinerfeñista. Poco después, con la entrada de Jouini (73''), el Tenerife reordenó la situación y Ñíguez cogió las riendas del partido, todavía con Amath muy efervescente y Lozano y el tunecino formando pareja atacante.

Cuando el partido entraba en su recta final un fulgurante contragolpe blanquiazul fue culminado por la flecha cedida por el Atlético de Madrid con una incursión en el área y un tiro potente que Ximo Navarro se encargó de desviar hacia el fondo de su portería (81''). Un gol que premiaba la fe y la ambición de un Tenerife que por fin encontró en el partido el botín que había buscado desde el saque inicial. Con el calor haciendo mella en los dos equipos, los de Martí supieron congelar los instantes finales del encuentro para sumar un nuevo triunfo que presenta un panorama más alentador de cara a los inminentes duelos ante Mallorca y Mirandés.

Una nueva oportunidad para no bajarse del caballo ganador de la última semana blanquiazul.

0-1

ALMERÍA TENERIFE

UD Almería: Casto (1), Ximo Navarro (1), Trujillo (1), Morcillo (1), Nano (1); Fran Vélez (s.c.), Ramón Azeez (1); Antonio Puertas (1), Pozo (2), Fidel (1) y Quique González (1). En el minuto 28, Fran Vélez, dejó su puesto a Corona (1); en el 69, Diamanka (0), sustituyó a Azeez; y en el 76, Chuli (s.c.) entró por Pozo.

CD Tenerife: Dani Hernández, Raúl Cámara, Germán, Carlos Ruiz, Camille; Crosas, Vitolo, Aitor Sanz, Suso, Amath N''Diaye y Choco Lozano. En el minuto 62, Crosas dejó su puesto a Aarón Ñíguez; en el 73, Jouini sustituyó a Suso; y en el 88, Alberto entró por Lozano.

Árbitro: Guillermo Cuadra Fernández (1), del Comité Balear. Se le reclamaron dos penaltis en área almeriense que pudieron serlo. El primero por unas manos de Morcillo cuando pugnaba con Lozano y luego un derribo a Raúl Cámara al que desequilibraron con un empujón. Amonestó a Trujillo (4''), Nano (33'') y Diamanka (85'') por parte local, y a los blanquiazules Lozano (33''), Crosas (36'') y Camille (89'').

Goles: 0-1, m. 81: Un contragolpe del CD Tenerife acaba en los pies de Amath que rompe por velocidad a su marcador internándose en el área para sacar un disparo cruzado que acaba desviando a su propia meta el defensa Ximo Navarro.

Incidencias: Partido de la quinta jornada de la Liga 1 2 3, disputado en el estadio Juegos del Mediterráneo ante 8.107 espectadores, según cifras oficiales. Mañana muy calurosa con unos 30 grados de temperatura. El feudo andaluz estrenaba nuevo césped, tras colocar esta semana los tepes de hierba la empresa Royalverd, por lo que el estado de la superficie estaba en perfectas condiciones. Jorge fue el descarte de Martí de los 19 jugadores convocados.