Dos sacerdotes católicos fueron asesinados hoy después de haber sido secuestrados en un templo en el municipio de Poza Rica, informó la Fiscalía General del oriental estado mexicano de Veracruz.

Un grupo armado entró en la Iglesia de Nuestra Señora de Fátima y secuestró a los dos curas y al conductor de los religiosos, según la fiscalía.

Agentes de diversas corporaciones de seguridad emprendieron un operativo de búsqueda y a las pocas horas hallaron con vida al conductor, quien fue puesto a disposición de las autoridades para que pueda declarar.

Posteriormente, miembros de la corporación de elite Fuerza Civil localizaron los cuerpos de dos personas en un paraje adyacente a la carretera Papantla-Poza Rica, en la comunidad Reforma Escolín del municipio de Papantla, zona conurbada a Poza Rica.

La Fiscalía confirmó en un comunicado que se trata de los sacerdotes Alejo Naborí y José Alfredo Jiménez, y anunció la apertura de una investigación.

Señaló que a esa región del norte del estado, con fuerte presencia del crimen organizado, llegaron peritos para realizar el levantamiento de los cuerpos y recoger indicios que serán integrados a las pesquisas.

La Conferencia del Episcopado Mexicano emitió un comunicado hoy en el que expresa su "dolor e indignación ante la violencia ejercida" contra los dos sacerdotes, y exhorta a la autoridad a esclarecer los hechos y aplicar la justicia contra los responsables del doble crimen.