Todo dependerá de lo que decida la ejecutiva regional del PSOE, que se reunirá esta tarde en Santa Cruz, pero, por lo vivido ayer en el pleno del Parlamento de Canarias mientras se debatía la censura en Granadilla y lo que se palpó tras su confirmación, el pacto regional puede tener las horas contadas. Si se atendiera a lo dicho, nada menos (a priori), por el secretario de Organización del PSC, Julio Cruz, cuando aún faltaba una hora para el pleno en el sur, al hablar de "rompimiento" sin ambages si no se rectificaba, habría poco más que añadir. No obstante, y porque su figura y actuación en estos días ha quedado muy en entredicho en CC (que insiste en que negoció un acuerdo para el municipio con dimisiones en ambos partidos), pero, sobre todo, en buena parte del PSOE, aún puede primar la tendencia que sostienen diputados como el palmero Manuel Marcos, quien cree que debe imponerse la frialdad, mesura y perspectiva para mantener un acuerdo que, a su juicio, funciona y que no puede caer por un pueblo como Granadilla. Al salir para almorzar en el descanso plenario, la vicepresidenta, Patricia Hernández, se limitó a decir que apoya lo que decida su formación y que ya hablará en la ejecutiva esta tarde. Sin embargo, justo antes de comenzar la sesión, y ante el resumen que le hizo El Día de lo que podría hacer su partido trasladado por algunas fuentes internas, indicó que "el que diga que ladraremos pero no morderemos no conoce al PSOE". La frase ratificaba las crecientes sensaciones que se iban viviendo en la Cámara: que el mantenimiento del pacto más allá de Granadilla, que parecía bastante más probable al principio por la lectura general en islas como La Palma, Fuerteventura o Lanzarote, iba sucumbiendo ante los socialistas que consideran que la concatenación de agravios es suficientemente aguda como para dejar pasar, reciclar o contextualizar lo de ayer. Además, y aunque se recalca que ha sido mucho más grave la desautorización al consejero de Sanidad por parte del presidente o hasta el cierre presupuestario al que se opuso el PSOE, los tendentes a la ruptura total ponían especial énfasis ayer en que fue el propio Clavijo el que firmó un documento en contra de una censura en Granadilla, único municipio en que existía ese compromiso. Con algo así, en el PSOE se impone la conclusión de que es inviable seguir con un socio así porque puede incumplir cualquier cosa. Entre los partidarios de mantener el acuerdo, se argumenta que la ruptura afectaría a muchas administraciones ahora con estabilidad, así como a leyes importantes en curso (como la de Servicios Sociales). Sin embargo, en el seno del gobierno, consejeros que hasta ahora consideraban que los vaivenes por los incumplimientos del pacto no solo no estaban afectando a la gestión, sino que casi ni se notaban, ayer se mostraban bastante pesimistas sobre la continuidad del cogobierno. Es más, y pese a que el PSOE, en su mayoría, ha respaldado la ley del suelo y la de Islas Verdes hasta ahora (con la gran salvedad de tres diputados que se ausentaron en la votación), ayer se esgrimían estas normas, lo ocurrido en La Frontera o La Laguna y cómo actuó el PSOE, la afirmación de Clavijo de que "no habla con medianeros" y cómo se ha dado la negociación para intentar evitar la censura como motivos muy poderosos para romper. Un cóctel casi mortal que profundiza más la daga que ha supuesto lo de Granadilla en un vaso colmatado de agravios.

CC plantea una reversión del acuerdo por lo local

El portavoz de CC en el Parlamento, José Miguel Ruano, no pudo reprimir ayer un rostro de preocupación y circunstancias (o disimula muy bien) al comparecer ante numerosos medios. El diputado conejero, una de las voces más respetadas en CC, admitió que "ambos partidos han fracasado" al intentar encauzar los incumplimientos. Aunque dijo no querer sacar los del PSOE (si bien obvió La Frontera o La Laguna), sí mencionó Arona antes de defender una reversión del pacto que libere la municipalidad y lo limite al Gobierno, que cree que funciona muy bien, y cabildos. A su juicio, el secretario de CC, José M. Barragán, no debe dimitir por prosperar la censura y alabó sus esfuerzos para intentar evitarla, deslizando el supuesto incumplimiento del PSC de ese "acuerdo" con dimisiones en ambos partidos en Granadilla. No obstante, se mostró muy crítico con los ediles de CC, a los que culpó de poner en peligro para su partido plazas tan importantes como La Laguna, Icod o Tacoronte. Esto entronca con la impresión asimilada en parte de CC de que, si bien aún hay opciones de que el PSC no rompa todo, sí irá devolviendo piezas sin que puedan decir nada. Muchos en CC, incluso consejeros, creen esto inevitable, aunque otros consideran inviable en La Laguna por el significado simbólico que tiene para CC, aparte de posibles descubrimientos desagradables en "alfombras y gavetas".

Pedro Sánchez deja libertad de acción al PSC

Aunque bastante tiene con su partido, en CC sentó ayer mal que Pedro Sánchez deje libertad de acción al PSC para romper o tomar la decisión que crea mejor. Hasta ahora, se creía que el hilo directo de Clavijo con Sánchez, del que el presidente ha alardeado hasta puntos dolorosos para el PSC, como al hablar de medianeros, era un dique clave ante cualquier terremoto, pero ayer se debilitó esa invulnerabilidad.

"Me dijeron el viernes en ATI que habría censura"

El portavoz del PSOE en el Parlamento, Iñaki Lavandera, no quiso pronunciarse ayer sobre qué puede pasar en la ejecutiva de su partido pues nunca ha vivido una situación como esta. Sin embargo, y en declaraciones a El Día, sí salió al paso de las críticas de CC a Julio Cruz y desveló que "alguien de ATI me dijo el viernes que habría censura y los ediles no serían expulsados", tal y como pasó.

En CC insisten en que Cruz negoció dimisiones

Un miembro importante de CC, presente en el consejo del sábado y testigo "de las llamadas entre Barragán y Cruz", recalcó ayer a El Día que los contenidos del ya célebre acuerdo (existente o fantasmagórico) se los leyó el secretario de CC a su homólogo, quien presuntamente los aceptaba mientras los oía, aparte de cerrar sendas reuniones para la noche del domingo y la mañana del lunes. Fuentes del PSOE en el Gobierno, por el contrario, indican que hubo 3 versiones de esa propuesta y que, desde el lunes anterior, en la mesa del pacto, los socialistas dijeron no.

Podemos confirma

contactos en La Laguna

Fuentes de Podemos confirmaron ayer que su partido y las otras fuerzas de izquierdas en La Laguna (NC y PSOE) han mantenido contactos para buscar una alternativa de gobierno que no necesariamente tendría a un alcalde socialista.

Castro (CC) no ve motivos para la ruptura

Antonio Castro (CC) reiteró ayer que no hay motivos para romper un pacto "que funciona" por lo ocurrido en Granadilla o por otras razones y que, en tal caso, el PSOE "se equivocaría y saldría perjudicado".

Curbelo no cree que se rompa y el PP, tampoco

Casimiro Curbelo (ASG) y el presidente del PP en Tenerife, Manuel Domínguez, señalaron ayer a El Día que el pacto no se romperá. Domínguez, además, remarcó que el acuerdo en Granadilla con CC es el mismo que el de junio de 2015 y que algo así no se hace sin saberlo en instancias superiores. López Aguilar (PSOE) cree que deben romper por dignidad.