El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, confió ayer en poder reconducir las relaciones de su partido, CC, con el PSOE para mantener el acuerdo entre ambas fuerzas, ya que considera que la diferencias surgidas con los socialistas son "pequeñas" y responden a "escaramuzas personales".

"Estamos intentado superar esas pequeñas diferencias", dijo Clavijo en un desayuno informativo en Madrid organizado por Europa Press, en el que, rodeado por políticos y empresarios del Archipiélago, habló de la política de "sentido común" alejada de los "gestos".

El presidente recalcó que la estabilidad política e institucional es fundamental para el desarrollo de las Islas y, en este sentido, se mostró confiado en mantenerla. Asimismo, descartó rotundamente cambios en su Gobierno, en el que hay cuatro consejeros socialistas, y afirmó que el ambiente dentro de su gabinete es "muy cordial". "No veo dificultades, con un poquito de voluntad, para que las cosas se reconduzcan", para lo que aseguró: "Vamos a hacer un esfuerzo todos".

El jefe del Ejecutivo explicó que el acuerdo "en cascada" alcanzado entre CC y el PSC-PSOE -desde el Gobierno de la Comunidad Autónoma, pasando por los cabildos hasta llegar a los ayuntamientos- a veces puede entrañar complicaciones en los municipios.

Según argumentó, en los municipios se generan "posiciones irreconciliables" y "temas personales que son desagradables", como ha ocurrido en Granadilla de Abona, en Tenerife. Aunque no se trata de una localidad muy grande, la moción de censura sí importa mucho a los socialistas "por lo que representa su alcalde", admitió.

En cualquier caso, Clavijo recordó que en el anterior mandato, le "tiraron" a CC dos cabildos (El Hierro y La Palma) y, sin embargo, se mantuvo el acuerdo por cuestiones de estabilidad.

Una estabilidad que, a su juicio, también debe basarse en un nuevo modelo económico que permita reducir el desempleo y generar crecimiento con el fin último de mantener el estado de bienestar.

En este sentido, reiteró que no habrá recortes en los presupuestos de la Comunidad Autónoma para el próximo año que, adelantó, serán "moderadamente expansivos" si el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas mantiene el déficit en el 0,1% y el techo de gasto en el 2,2%. Pero serán "expansivos", matizó, si finalmente se llega al 0,4% o 0,5% de déficit y se baja la regla de gasto al 1,8%, porque habrá un escenario "mucho más holgado".

El presidente recordó que Canarias se situó en julio como la segunda región con mayor superávit, la tercera con menor endeudamiento y un crecimiento y una creación de empleo por encima de la media nacional. Reconoció, no obstante, que el principal problema sigue siendo el paro, que afecta a 230.091 personas.

Para afrontarlo, el Gobierno canario ha diseñado una estrategia basada en cinco pilares, el primero de ellos la creación del denominado Fondo de Desarrollo de Canarias, dotado de 1.600 millones de euros procedentes del extinto IGTE. Los otros cuatro ejes son la apertura de la economía hacia el exterior, la modificación de la Ley del Suelo para reducir trámites administrativos, la apuesta por la educación bilingüe y la Formación Profesional y una nueva relación con la UE como región ultraperiférica.