Canarias fue hace treinta años pionera, junto a Cataluña, en cuidados paliativos. Sin embargo, con el paso de los años se ha ido quedando atrás, y actualmente es una de las únicas comunidades autónomas, junto a Ceuta y Melilla, que aún no cuenta con un plan regional para este modalidad asistencial.

Aún quedan cinco meses para que este plan vea la luz. De momento, nos tendremos que conformar con un borrador avanzado realizado por el Dr. Marcos Gómez Sancho, director de la Unidad de Paliativos del Hospital Universitario de Gran Canaria Dr. Negrín.

El director asegura que el objetivo es que el plan esté concluido en marzo del año que viene. "Este mes de octubre avanzaremos un análisis de la situación actual y un plan de necesidades", asegura.

Aunque los cuidados paliativos llegaron a Canarias con muy buen pie, ha habido "un freno total desde hace aproximadamente 10 o 12 años".

Esta modalidad asistencial se ocupa de aquellos pacientes que son incurables y cuyo fallecimiento se espera en un plazo corto de tiempo. Son unos cuidados necesarios tanto para el enfermo como para la familia y precisan de todo tipo de especialistas, desde médicos hasta psicólogos, pasando por enfermeros y trabajadores sociales. "El objetivo ya no será intentar curar a un enfermo, sino conseguir el confort, la comodidad y la calidad de vida del paciente", explica Gómez Sancho. La situación en la que se encuentran los cuidados paliativos en Canarias, asegura el director, hace que "estamos igual y en algunos casos peor que hace 10 o 12 años".

El doctor tiene ahora la responsabilidad de intentar que este servicio mejore en las islas gracias al Plan Regional que le encomendó realizar el consejero de sanidad, Jesús Morera. Gómez Sancho, incide en que el consejero de sanidad es "muy sensible sobre este problema", y por eso pretende aprovechar el tirón de ese "interés especial" para mejorar la situación actual.

Uno de los ejemplos que demuestran que las unidades de cuidados paliativos están trabajando sin casi recursos es la cantidad camas. Actualmente en toda la Comunidad Autónoma solo hay entre 47 y 48 camas, "muy lejos de los estándares reconocidos". La Organización Mundial de la Salud advierte que deberían haber 80 camas por cada millón de habitantes, por lo tanto en Canarias harían falta unas 160. No obstante, Gómez Sancho garantiza que en Canarias con 80 será suficiente.

Para el doctor, lo ideal sería que el plan regional se pusiera en funcionamiento de inmediato una vez que se termine, sin embargo entiende que no puede "pretender que todo lo que hace falta poner en marcha en Canarias se pueda hacer a la vez y de manera inmediata". Por esta razón, da un plazo de cinco años para que se vaya instaurando progresivamente.