El presidente del Gobierno español en funciones, Mariano Rajoy, reiteró hoy su pesar a la primera ministra británica, Theresa May, por el ''brexit'' y aseguró que defenderá los derechos de los ciudadanos y empresas españolas y los de la Unión Europea (UE) ante la nueva situación.

Ambos mandatarios mantuvieron hoy una reunión en Madrid, seguida de un almuerzo de trabajo, aunque sin comparecencia posterior ante la prensa, para analizar las consecuencias del "brexit".

Este es el primer viaje a España de May desde que sustituyó a David Cameron al frente del gobierno británico, y forma parte de una gira por varias capitales europeas para recalcar la decisión del Reino Unido de salirse de la UE, con el objetivo de buscar la mejor relación posible con sus aliados europeos.

Según fuentes gubernamentales, Rajoy escuchó los planteamientos de la primera ministra británica para llevar a efecto la decisión de Reino Unido de abandonar la Unión Europea.

El jefe del Ejecutivo español en funciones recordó a May que la posición unánime de los 27 estados miembros de la UE es no abrir ningún tipo de negociación para hacer efectivo el "brexit", hasta que el Reino Unido notifique oficialmente su decisión de abandonar la Europa comunitaria.

Asimismo, le manifestó que defenderá el proyecto de integración europea porque España considera que una UE eficaz y cada vez mejor integrada, también forma parte de la defensa de los intereses españoles.

Del mismo modo que España defenderá los intereses de sus ciudadanos, Rajoy señaló a May que los británicos que residen en España, los millones de turistas que visitan el país y las empresas del Reino Unido establecidas en territorio español, pueden estar tranquilas. Actualmente, unos 310.000 británicos viven en España y unos 102.000 españoles residen en el Reino Unido.

Del mismo modo, le ha asegurado que España aspira a mantener en el futuro una relación estrecha y de amistad con el Reino Unido, tanto a nivel bilateral como en el marco de la UE.

Fuentes del Ejecutivo no han confirmado que Rajoy y May hayan hablado del futuro de Gibraltar, un asunto que motivó la semana pasada un cruce de declaraciones entre el ministro de Asuntos Exteriores español en funciones, José Manuel García Margallo, y el ministro principal del Peñón, Fabián Picardo.

Después de que Picardo asegurara en la ONU que España nunca pondría la mano en Gibraltar, Margallo dijo que el "brexit" era una oportunidad para España como no ha existido desde que en 1713 perdiera este territorio y ofreció al Reino Unido la cosoberanía del Peñón.

Desde Londres, hoy, el ministro británico de Asuntos Exteriores, Boris Johnson, aseguró que no habrá cambios en la soberanía británica de Gibraltar por el "brexit" y adelantó que opondrá una resistencia "implacable" si España lo solicita.

España también mostró hoy su apoyo a la integridad del Reino Unido ante la posibilidad de que el "brexit" pueda alentar un nuevo intento de Escocia para independizarse.

Rajoy trasladó este apoyo a May la misma jornada en la que la ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon, anunció que el Gobierno escocés publicará la próxima semana el borrador de un proyecto de ley para pedir un segundo referéndum de independencia del Reino Unido a raíz del triunfo del "brexit".

El Gobierno español en funciones, sin hacer referencia explícita a este anuncio, informó de que, en su reunión, Rajoy expresó a May que España apoyará la integridad del Reino Unido.

En esa línea, le ha expuesto que no alentará ningún tipo de secesionismo relacionado con la salida de este país de la Unión Europea.

El apoyo de España a Reino Unido coincide con el desafío soberanista que impulsan un grupo de partidos en el Parlamento regional de Cataluña (sureste), que ha aprobado la celebración de un referéndum unilateral de independencia y la desconexión de la región del Estado central, una decisión anulada por el Tribunal Constitucional español.