El fútbol camina a tal velocidad que las preocupaciones son dramas y las malas rachas, situaciones terminales. Por eso, Tenerife y Cádiz se enfrentarán en la primera final de la temporada cuando apenas se llevan disputadas nueve jornadas ligueras. La eliminación copera ante Valladolid y Córdoba respectivamente ahonda en la herida. Los unos porque no se ve, pese a la mínima distancia de tres puntos sobre el "play-off", el carácter de aspirante que se pretendía. Los otros, porque tras seis temporadas en Segunda B, sienten pavor a acomodarse en los puestos de descenso.
Por eso, desde dentro se reconoce la trascendencia del encuentro. "Estamos fastidiados, después del esfuerzo del equipo, y regresando a casa sin pasar a la siguiente eliminatoria, pero tenemos ya la mente puesta en el próximo domingo, donde nos espera un partido importantísimo", aseguraba ayer Álex García a la llegada de la expedición blanquiazul. El conjunto que dirige José Luis Martí no gana desde la visita a Almería y, además de la derrota en Miranda de Ebro, ha sumado igualadas que le han impedido acercarse a la parte alta de la tabla. "Llevamos una serie de empates y hay que ganar de nuevo", insistía el jugador vasco, que no termina de encontrar su mejor versión en las oportunidades que le ha dado su técnico. "Entrega y sacrificio no me faltan, pero quizá sí demostrar en los partidos esa chispa con la que me noto en los entrenamientos", explicó.
Esa mejoría se atisba también en el rival. "Empezamos a tener el equipo que queremos. Está costando, pero cada vez estamos más cerca", aseguraba Álvaro Cervera tras caer en la Copa. Se quejaba el técnico de la falta de contundencia en las áreas. "No hemos estado acertados en las dos áreas. En la contraria las hemos tenido y en la nuestra hemos fallado en ciertas ocasiones", declaró. El parecido con el Tenerife es evidente, puesto que en Zorrilla los insulares dispusieron de claras ocasiones para cambiar el curso del encuentro. No atinaron. En cambio, concedieron demasiado a los blanquivioletas.
Álvaro Cervera regresa este domingo al Heliodoro. El segundo entrenador que más veces se ha sentado en el banquillo del Tenerife (110 partidos), el hombre que dirigió el retorno a Segunda A en la temporada 12-13, salió abruptamente de la Isla en febrero de 2015.
Entre sus logros, el exentrenador blanquiazul contó con un número elevado de canarios y, durante el curso 13-14, llegó a utilizar once isleños en un mismo encuentro, una circunstancia que no se producía en el Tenerife desde 1987. En total hizo debutar a diez canteranos. También es el segundo técnico que ha conseguido ganar más de dos derbis, en los que firmó la mayor victoria en la historia del clásico canario en Liga (3-0) en diciembre de 2014. Pese a ello, tanto él como su ayudante, el tinerfeño Roberto Perera, no descartan un recibimiento hostil.
El Tenerife participa en el Día de la Banderita
El consejero Juan Manuel Quintero, Vitolo, Denzell, Antonio Samuel, Choolani y Barber y miembros de la Asociación de Antiguos Jugadores representaron al club en la iniciativa de Cruz Roja./ m. santos