Miles de estudiantes canarios de Educación Secundaria y Universidad están llamados mañana a secundar la huelga convocada a nivel nacional para exigir la derogación de la Lomce y las reválidas. Los alumnos exigirán, además, la rectificación del decreto "3+2", que reduce la duración de los grados pero aumenta la de los másteres, lo que en la práctica supone un encarecimiento del precio de la matrícula.

Sindicatos, asociaciones de padres y estudiantes escenificaron ayer su apoyo unánime al paro en dos ruedas de prensa celebradas en Tenerife y Gran Canaria. Los docentes no dejarán de acudir a sus puestos de trabajo pero secundarán las protestas programadas por la tarde. En Tenerife se realizará una manifestación desde la plaza Weyler hasta la del Príncipe, mientras que en Las Palmas se han programado dos actos: una manifestación que partirá a las 12:00 horas de la plaza de Santa Ana y concluirá en el parque de San Telmo, y una concentración a las 18:00 horas ante la sede de la Delegación del Gobierno en Canarias.

En la Universidad de La Laguna, la Asamblea para el Movimiento Estudiantil Canario (AMEC) ha pedido a los jóvenes que no acudan a clase y que se concentren a las 11:30 en las escaleras del Edificio Central.

José Ramón Barroso, representante de la Federación de Enseñanza de CCOO, explicó que el motivo de que los docentes hayan decidido no secundar la huelga es "que no se confundan las reivindicaciones". En su opinión, esta protesta no debe ser "eclipsada" por otras demandas retributivas o sobre condiciones laborales. "El escenario que se abre ahora, con la certeza de que tendremos cuatro años más de gobierno de Rajoy, estará lleno de protestas por parte del profesorado", auguró. "La rebaja previsible en los presupuestos educativos no dibuja un panorama alentador", admitió.

Por su parte, Pedro Crespo, presidente de ANPE Canarias, mostró su apoyo a los estudiantes, rechazó el sistema de reválidas, defendió un modelo de "evaluación continua" y volvió a abogar por alcanzar un pacto de estado en educación.