La agricultura de exportación, fundamentalmente la hortofrutícola, que representa el 57 % del total, y el mercado turístico canario, donde los británicos suponen el 31 % de las llegadas y el 37 % del gasto, son los sectores isleños que más pueden verse afectados por el Brexit.

Aunque no se prevé que este proceso, que el Reino Unido prevé iniciar en marzo de 2017, afecte a corto plazo a Canarias, la comisión encargada de valorar su impacto sobre la economía del archipiélago trabaja ya en la elaboración de un documento que permita al Gobierno regional, las patronales y los sindicatos "monitorizar la incertidumbre" que genera y gestionar su materialiazación.

Así lo ha anunciado hoy el consejero canario de Economía, Industria y Comercio, Pedro Ortega, tras la primera reunión de esta comisión, un encuentro en el que se ha hecho un "inventario" de los diferentes indicadores agrícolas, comerciales, turísticos y educativos susceptibles de alterarse por los efectos del Brexit.

Ortega ha informado de que los miembros de esta comisión han puesto en común "datos de situación" de la inversión del Reino Unido en Canarias, el número de británicos que hay en la comunidad autónoma o el peso que tiene este mercado en la industria turística local para poder prever los "efectos directos e indirectos" que puede ocasionarles la separación del Reino Unido de la UE.

Sobre la "fotografía" que conforman en la actualidad los datos analizados en el encuentro de hoy, el consejero ha detallado que hay 2.300 canarios en el Reino Unido, mientras que aquí hay 27.000 británicos residentes.

Además, el 27 % de los extranjeros no residentes que compran vivienda en Canarias son británicos, nacionalidad que representa el 21 % de los extranjeros residentes que compran vivienda en el archipiélago.

El consejero también ha precisado que el 52 % de la balanza comercial de los productos hortofrutícolas que exporta Canarias va al Reino Unido, país que es el mayor inversor extranjero en las islas, al representar el 10 % del total.

En cualquier caso, Ortega ha pedido "cautela" ante este proceso ya que, a su juicio, la intensidad y la dirección de sus efectos pueden variar en función de lo brusca o lo pausada que sea la forma en que se produzca.

"Hace unos días decían que no se iba a consultar con el Parlamento británico y resulta que ahora sí, eso suaviza la salida un poco, vamos a esperar a ver qué es lo que se produce, por eso estamos en un período de incertidumbre, donde hay que tener los mejores datos para interpretarlos de una forma abierta", ha referido.

El consejero regional de Economía se ha mostrado confiado por el incremento que registran las reservas de turistas británicos en Canarias para 2017.