La escasez de instalaciones alojativas de grandes dimensiones en Santa Cruz de La Palma, especialmente tras el cierre hace ya seis años del Hotel Marítimo, está provocando que diferentes promotores apuesten por la puesta en marcha en la capital de pensiones con un número reducido de camas a ubicar en casonas, negocios que buscan aprovechar la consolidación de la Isla como destino turístico y, también, el mayor interés que pueda despertar la ciudad (está por comprobar) cuando disponga de la ansiada playa en su frente marítimo.

Los dos últimos establecimientos turísticos recibieron el pasado mes de octubre la autorización previa de la Consejería de Turismo del Cabildo de La Palma, que ayer publicaba sendas resoluciones en el BOP al objeto de que aquellas personas interesadas puedan analizar los expedientes y presentar las alegaciones que estimen oportunas en el plazo de un mes.

La primera de estas instalaciones tiene la tipología de hotel emblemático, según reza en el expediente, con seis unidades alojativas y doce plazas de capacidad. Se encuentra situada en la calle San Sebastián, en el número 18. La vivienda que se pretende destinar a turismo se sitúa prácticamente al comienzo de la subida a este emblemático barrio, a poco más de un centenar de metros del Teatro Circo de Marte. El inmueble precisa de obras de restauración, al menos en su fachada.

La segunda de las autorizaciones afecta a un establecimiento extrahotelero en la tipología de casa emblemática, de una unidad alojativa y con ocho plazas de capacidad, a ubicar en la calle Álvarez de Abreu (la Trasera), número 53. Es decir, en el "corazón" de la capital. El inmueble presenta al menos en su exterior un buen aspecto.

A estos expedientes se suman otras dos instalaciones. Una de ellas se encuentra ya construida en el antiguo Bar Quitapenas, encima de la actual licorería, a la entrada de la calle Real, una promoción de Tenerife Style SL. Techo de madera, materiales de primera calidad, iluminación exterior... Son tres unidades alojativas (apartamentos) con seis plazas de capacidad.

El mismo promotor construye además un hotel de mayores dimensiones a los citados, en concreto será de 16 habitaciones con 32 camas, en la avenida Marítima, junto al antiguo Parador de Turismo, una obra que se inició con el derribo de una casona centenaria, respetando su fachada.