Carlos Ruiz no falla en las alineaciones del Tenerife si no es absolutamente necesario. Sus entrenadores en la Isla han contado con él siempre que ha estado disponible (solo fue suplente por decisión técnica en dos ocasiones) y, por eso, es normal que José Luis Martí esté deseando volver a contar con él. Pese a que el periodo de baja establecido era algo mayor, apenas 19 días después de fracturarse el malar ante el Cádiz, el central se ofrece para jugar mañana en Girona. "Me veo y estoy disponible", confirmó ayer.

Otra cosa es que su reaparición se convierta en una realidad, algo que pasará también por la decisión que tome junto a "Martí y los médicos". El de Baza, sincero como siempre, solo ve una pega y es que aún va con miedo a las acciones en las que puede chocar con un atacante. "Se me nota que voy con cuidado y no voy con la fuerza que tengo que ir", reconoció. Su concurso pasaría por "hacer más pruebas" para observar si la lesión está consolidada. "De momento estoy entrenando y soy uno más, pero el míster y los médicos van a decidir", insistió.

De entrar en la convocatoria para el viaje a Girona, le acompañaría su nueva e inseparable amiga. "Me hicieron una máscara a medida y me encuentro cómodo con ella", explicó Ruiz, que espera "coger más sensaciones" a medida que vaya sumando entrenamientos porque todavía "hay lances" en los que va "con cuidado". No sería el primer futbolista que juega con esta protección, pero habría que valorar el riesgo de hacerlo en función de la evolución que presente la peliaguda dolencia del profesional tinerfeñista.

"El Girona es de los más complicados en su casa"

Montilivi no es el mejor campo para puntuar. Eso lo sabe Carlos Ruiz, que considera que el Girona es "de los rivales más complicados en su casa". Con números que asustan (ha marcado en tres de los seis partidos en su feudo hasta tres goles y está invicto), el Tenerife se aferra al trabajo. "Hemos preparado bien la semana para llegar con opciones de conseguirlos tres puntos", aseguró el zaguero blanquiazul, que prefiere centrarse en este encuentro y no pensar que luego vienen dos jornadas en casa, "lo que nos podría ayudar a salir de la parte baja de la clasificación".

Analizando el choque ante el Girona, Ruiz destacó que la forma de jugar es distinta al resto (Pablo Machín emplea un dibujo con tres centrales y dos carrileros). "Cuando te acostumbras a jugar a rivales con sistemas parecidos y viene uno como el Girona que tiene muy asentado su esquema de juego con tres atrás muy fuertes y que hacen muchas ayudas y la gente por fuera llega y pisa área, hace que te tengas que adaptar de manera diferente a otros rivales. Crea muchas dificultades", detalló antes de resaltar la labor de Borja García y Portu, que "marca diferencia con su velocidad y aprovecha los espacios a las espaldas de las defensas".