El reloj de la Puerta del Sol cumple hoy 150 años y celebra su aniversario con una representación teatral de su fabricación, una conferencia sobre su maquinaria y mantenimiento, una visita virtual a través de los móviles o unas uvas "especiales" a mediodía.

La agenda de la efeméride comienza a las 10.00 horas con uno de los relojeros de la Relojería Losada, Jesús López, quien pronunciará una conferencia sobre la historia, la maquinaria y el mantenimiento del aparato.

Además, la directora general de Patrimonio Cultural, Paloma Sobrini, hará una introducción en la que glosará algunas de las curiosidades del reloj y del propio edificio de la Puerta del Sol.

Después, a las 11.00, 12.00 y 13.00 horas, habrá una representación teatral con Rafa Maza que, como un viaje en el tiempo, permitirá conocer la historia de la fabricación del reloj y el inicio de la tradición de celebrar la llegada del año nuevo comiendo uvas con sus doce campanadas.

El aforo es limitado, y la entrada será libre por orden de llegada.

También será posible visitar al reloj a través de smartphones con un vídeo grabado en 360 grados que se subirá al canal de la Comunidad de Youtube, y que permitirá pasear por la torre del reloj y ver su maquinaria.

Además, se podrá visualizar una pequeña muestra de fotografías históricas del reloj y de la propia Puerta del Sol.

Al mismo tiempo, numerosos rostros televisivos vinculados a la noche de Fin de Año y la retransmisión de las campanadas -como Ramón García, Cristina Pedroche, Inmaculada Galván o José María Íñigo- felicitarán al reloj en su 150 aniversario a través de un vídeo.

Por su parte, algunos poseedores de la tarjeta abono transportes joven de 20 euros podrán visitar en directo el reloj tras haber participado en un sorteo mediante el concurso en la web www.ventex20.es.

El reloj de Sol, obra de José Rodríguez Losada, fue una donación de este relojero leonés afincando en Londres para sustituir al anterior, en funcionamiento desde el siglo XVIII, tras el derribo de la iglesia del Buen Suceso de Madrid -situada en la misma plaza- y que tenía mala fama entre los madrileños por sus continuos desajustes.

Tres años fueron necesarios para la puesta en funcionamiento de este reloj, con una maquinaria totalmente artesana, y finalmente fue inaugurado por la reina Isabel II el 19 de noviembre de 1866, con motivo de su cumpleaños; de hecho, la campana lleva su dedicatoria.

El reloj ha sido testigo mudo de una parte de la historia de España, como la proclamación de la República, la Guerra Civil, y numerosos bombardeos, en uno de los cuales, según dicen, un obús llegó a entrar en el edificio por la esfera que da a la calle Carretas, aunque afortunadamente no estalló y permitió que el reloj siguiera funcionando.