Más dinero, pero no el suficiente. La consejera de Educación, Soledad Monzón, presentó ayer en comisión parlamentaria el presupuesto del área para 2017 -1.547 millones, 42 más que este año-, un montante que permitirá emprender algunas mejoras enfocadas a garantizar la equidad y mejorar las competencias en idiomas, pero que, a juicio de todos los grupos y de la propia titular del área, resulta insuficiente para atender las necesidades del sistema. Lo ideal, según reconoció la responsable, sería disponer de "un presupuesto similar al de 2009", que alcanzó los 1.805 millones, o conseguir que la inversión en educación represente "el 5% del Producto Interior Bruto (PIB)". Es decir, si se toma como referencia ese año, el presupuesto ideal debería elevarse unos 258 millones más.

Monzón admitió a este periódico que el referente es el presupuesto de 2009, el año que más se invirtió en educación en las Islas. A partir de ese año la financiación descendió de manera considerable. En 2014 cambió la tendencia y creció por primera vez desde que empezó la crisis. Hoy, el presupuesto sigue aumentando, pero además de arrastrar un déficit de más de 250 millones de euros con respecto al año de referencia y de estar lejos de suponer el 5% del PIB, como marca la Ley Canaria de Educación, incluye muchas medidas de compensación social que van más allá de la labor educativa. Es decir, el dinero de Educación no es solo para educar.

Un ejemplo de ello es que la partida para comedores y desayunos sube dos millones y llega a los 14,3. También que el programa de uso gratuito de los libros de texto, impulsado este curso, aumenta para ayudar a las familias con menos ingresos. Lo hace en 3,5 millones, lo que significa que en 2007 se invertirán 7,3 millones. Este gasto permitirá extender el programa a todo el alumnado de cuota C en los comedores escolares. El objetivo es que al completar el plan, que tiene carácter trianual, estén incluidos todos los estudiantes de cuota B, es decir, de familias con rentas anuales inferiores a 16.000 euros. "La inversión será de unos 24 millones de euros y el alcance en torno a 120.000 menores", explicó Monzón.

Además, la partida "destinada a garantizar la igualdad de oportunidades" prevé una partida nueva para pagar cuatro billetes a los estudiantes de enseñanzas superiores de las islas menores que estudien en las capitalinas.

Con respecto al impulso de la enseñanza de idiomas, en 2017 se duplica la aportación al programa de auxiliares de conversación. El millón de euros presupuestado permitirá duplicar el número de auxiliares de conversación y alcanzar los 160 financiados por la Comunidad Autónoma, de manera que Canarias cuente con un total de 220 gracias a la aportación del Estado.

Una vez más no habrá dinero para educación de cero a tres años, una decisión muy criticada por Nueva Canarias, pero que, según Monzón, responde a un acuerdo con la Federación Canaria de Municipios, que ha preferido que la Consejería se concentre, dentro de sus posibilidades, en mejorar o habilitar nuevos centros. En total, la partida para infraestructuras en todas las etapas educativas supera los 22 millones.

Por último, las universidades logran un pequeño incremento de 2,2 millones cada una que seguramente se usará para reformas, y el proyecto estrella de Formación Profesional, Enlaza, tendrá una dotación de un millón de euros.

Más recursos en un crédito extraordinario

La consejera de Educación, Soledad Monzón, admitió ayer que confía en completar el presupuesto de su departamento gracias a la aprobación, el próximo año, de una ley de crédito extraordinario. Así y todo, la responsable calificó como "justo" el presupuesto asignado a su Consejería "en el contexto actual" y valoró que el Gobierno haya "primado las áreas sociales" a la hora de elaborar las cuentas.

El aumento, sin embargo, no convenció a la oposición. El diputado de Nueva Canarias (NC) Luis Campos fue bastante crítico con las cuentas y advirtió de que el crecimiento real de los presupuestos está en torno a los 30 millones, ya que en el cálculo hay que tener en cuenta el dinero que se sumó durante el ejercicio actual, gracias, también, a una ley de crédito extraordinario, señaló. Él y el representante de Podemos, Francisco Déniz, criticaron el aumento de la partida destinada a enseñanza concertada, que vuelve a crecer este año, consecuencia de un convenio plurianual firmado durante la anterior legislatura.

La diputada del Grupo Popular Águeda Montelongo lamentó que el aumento del presupuesto sea del 2,81%, es decir, inferior al crecimiento del conjunto del presupuesto, que sube un 4%, según sus cálculos.

"De esta manera, el presupuesto educativo pierde peso en el conjunto del presupuesto autonómico, al pasar del 24,68% del total al 24,53%", lamentó.