El empresario Antonio Plasencia, en contra de lo previsto, optó ayer por declarar aunque solo respondió a las preguntas de su abogado. Previamente se había leído el contenido de su comparecencia ante el TSJC en 2007. Plasencia dijo que su participación en esta trama se limitó a la compra de los terrenos en 1998 a la Junta de Compensación. La venta al ayuntamiento en 2001 fue negociada por su socio al 50% en Inversiones Las Teresitas (ILT), Ignacio González, ya que, según Plasencia, fue él quien insistió en vender al ayuntamiento. "Llevo más de cincuenta años en este negocio y siempre he comprado terrenos para edificar", dijo.

La playa fue una excepción porque el ayuntamiento "nos ponía pegas por todas partes. Estaba cansado de tanta manifestación para que no se construyera, así que le dije a Ignacio que se encargara de todo porque yo no quería saber nada". Además, "algunos concejales lanzaban veladas amenazas de que nos iban a expropiar".

El empresario de ILT declaró de forma imprevista, aunque solo respondió a su abogado

Reiteró que la compra se decidió por un encuentro fortuito con Mauricio Hayek, quien le informó del contenido de la sentencia del Supremo que permitía construir 300.000 metros cuadrados en el frente. Se lo dijo un mes después de haber comprado los terrenos. Recuerda que al vender cobraron el 60% de los 53 millones y el resto no se acuerda si fue cuando la Fiscalía Anticorrupción presentó querella en 2006.

Su desinterés por la venta fue tal que ni siquiera llegó a ver las maquetas del concurso internacional de ideas que pagó su empresa. "No sé ni quién estaba en el jurado", dijo. Recordó que el ayuntamiento les planteó diversas parcelas, pero mientras ellos pedían 109.000 metros cuadrados en enclaves como Cabo Llanos, apenas les ofrecían 30.000.