El reglamento del Parlamento tiene algunas cosas buenas, y la primera es que deja perfectamente claro que la mayoría, solo por serlo, no puede hacer lo que le da la gana. Siempre debe actuar dentro del marco de las leyes, en este caso del propio reglamento. Los grupos son autónomos para tomar las decisiones que estimen convenientes, para cambiarlas de un día para otro y para dar marcha atrás en esas decisiones. Pero esto es igual que la autonomía universitaria, de los jueces, o la municipal. Se ejerce siempre en el marco de la ley, no al margen de ella...

Ayer jueves, la minoría parlamentaria que representan los grupos parlamentarios de Podemos y Nueva Canarias bloqueó en la comisión de presupuestos que se pudiera debatir una enmienda ''in voce'' presentada por Coalición y apoyada por el Partido Popular, y los gomeros de Curbelo, con la abstención del PSOE. La enmienda no pudo ser debatida en Comisión, porque para poder ser incorporada al debate, se precisa del consenso unánime de los grupos. Tanto Podemos como Nueva Canarias usaron su prerrogativa parlamentaria de bloquear la decisión, que tendrá que pasar a pleno, y allí sí, los grupos podrán reconducirla. Será el día 21. La enmienda rechazada por Podemos y Nueva Canarias pretendía desatascar el reparto del Fondo de desarrollo creado con los 160 kilos del IGTE, reparto pactado por el Gobierno con los Cabildos y Ayuntamientos de Canarias con la excepción de la mayoría de los ayuntamientos grancanarios y el Cabildo de esa isla. Ese acuerdo fue bloqueado por enmiendas del PP, el PSOE, Nueva Canarias y Podemos, que desataron la crisis de Gobierno en el pacto, dispararon la rumorología sobre una supuesta moción de censura que habría de convertir a Patricia en presidenta y que acabo por desinflarse en una revuelta de los Cabildos contra el Parlamento y de las organizaciones socialistas en las islas menores contra la gestora del PSOE.

Ante la crispación creada por aquella decisión, el lunes de esta semana, Asier Antona se reunió con Clavijo y le propuso reconducir la situación y salvar el Fondo, por la vía de una propuesta conjunta para distribuirlo de acuerdo con los criterios de reparto del REF, un 58 por ciento para Ayuntamientos y Cabildos, y un 42 por ciento para el Gobierno, que podrá destinar libremente esos recursos a compensar a las islas menores en sus proyectos, con criterios de solidaridad. Esa es la propuesta que el PSOE votó ayer, después de haber reiterado en los últimos días que no modificaría bajo ningún concepto ni en ninguna circunstancia su apoyo a las enmiendas presentadas por Nueva Canarias y el PP. Dicho en cristiano, con su abstención de ayer, el PSOE se la ha envainado en apenas un par de días, de una forma bastante lastimosa, tras descubrir que la operación para desplazar a Clavijo mediante un pacto con el PP era pura ensoñación, y que ahora los socialistas están al borde de quedar fuera del Gobierno, si así lo decide Clavijo. En términos más corteses, el PSOE ha hecho un ridículo espantoso. Una verdadera chapuza de operación: pésimos aliados, pésima valoración de las propias fuerzas, pésima dirección estratégica. Nunca he visto vender en los medios una moción de censura antes de meterla por el registro del Parlamento. Y ahora, reculan y donde dijeron digo dicen Diego. Un desastre.