El año 2016 fue el de Oliver Laxe, un joven director de origen gallego que no ha dejado de cosechar premios con su último largometraje, "Mimosas" (2016), de la productora Zeitun Films. La cinta, que cuenta con producción española, marroquí, francesa y catarí, es, como su director, un gran ciudadano del mundo y ya se está estrenando en varios países. A España llega este 5 de enero, un gran regalo de Reyes.

Oliver Laxe solo conoce el éxito desde que comenzara como realizador. Su primera película "Todos vós sodes capitáns", rodada en Tánger, Marruecos, donde el director impartía clases de cine en un centro de acogida de menores, se estrenó internacionalmente en la Quincena de Realizadores del festival de Cannes, donde consiguió el galardón Fipresci en el año 2010. Años más tarde concurría a este mismo Festival, con "Mimosas" (2016), cinta que fue seleccionada en la 55ª Semana de la Crítica y que se alzó con el Premio Principal Nespresso Grand Prix 2016. Una convocatoria exclusiva organizada por la Unión de Críticos, donde priman la innovación, la creatividad y el talento y que han ganado previamente directores tan singulares como Ken Loach, Bernardo Bertolucci y Wong Kar Wai. En el caso de directores españoles, solo otros dos han sido premiados: Icíar Bollaín y Juan Antonio Bayona. Ahora ya son tres.

Siguiendo su periplo de festivales, "Mimosas" fue seleccionada en el año 2016 a los European Film Awards (los Oscar del cine europeo), también se presentó en el festival de cine de Toronto (TIFF) y acaba de concurrir al Festival de Cine Europeo de Sevilla, donde se alzó con el Premio Especial del Jurado y la Mención Especial al Mejor Sonido y Mejor Montaje. En el Festival de Cine de El Cairo también cosechó dos galardones.

Además, acaba de recibir el premio "Cidade Ourense", con ocasión del 21º Festival de Cine Internacional, en reconocimiento a su labor creativa y la difusión del cine gallego.

La película narra la travesía de tres personajes que quieren dar sepultura al cuerpo de su maestro y ambienta un viaje cargado de magia y poesía.

En todas las exhibiciones los críticos han destacado su lírica y espiritualidad, su fuerza y la potencia de sus imágenes, así como el talento de su director para la narración y la innovación visual, destacando su delicadeza y capacidad para poner en valor las pe-queñas cosas. Palabras sinceras de todos aquellos a los que ha conquistado su obra y que definen a Oliver Laxe no solo como realizador, sino como persona.