La asociación de vecinos Casco Histórico tiene controlado hasta el último detalle del centro lagunero. Obras, desperfectos, proyectos y actos; asuntos grandes y pequeños; problemáticas nuevas y antiguas. De todo un poco. Ayer lo volvieron a poner de manifiesto en el repaso anual ante los medios de comunicación que acostumbran a realizar y al que acudieron en este caso con una especie de decálogo de mejoras -nueve aspectos con los que discrepan y un aplauso al Consejo de Patrimonio-, y entre las que insistieron en la necesidad de revisar el Plan Especial de Protección (PEP) del casco.

"Después de más de 12 años de que se aprobó el PEP pensamos desde nuestra asociación que es fundamental abrir el proceso de revisión", apuntaron desde el colectivo, que abogó por un proceso participativo y con el que se trate de dar solución a problemas diversos. "Yo tengo la esperanza de que se empiece a evaluar ya pronto, pero nos han dicho que hay que esperar a que se apruebe el Plan General de Ordenación", señaló el presidente de la entidad, Pablo Reyes, que también puso el foco en la necesidad de que sean resueltos asuntos como la protección de las casas terreras, la falta de aparcamientos, el estado del mobiliario urbano, la necesidad de una oficina de gestión de la ciudad y el cumplimiento de las ordenanzas relacionadas con la cartelería, las mesas de terrazas o el tránsito de camiones.

Otro de los puntos en los que hicieron un mayor énfasis durante el encuentro fue en la polémica subida en el municipio del Impuesto de Bienes Inmuebles -el IBI o la popular "contribución"-, que ha generado a numerosos vecinos un desembolso imprevisto de hasta varios cientos de euros. "Hay que hacer una mejor previsión del gasto y evitar sorpresas desagradables como la subida del IBI", indicaron desde Casco Histórico, que tiene previsto plantear que este conflicto sea abordado en el Consejo Económico y Social, donde cuentan con un representante, y sobre el que intervendrán en el pleno de presupuestos.

No menos disconformes se mostraron con la ordenanza de convivencia ciudadana, sobre la que en varias ocasiones Reyes ha hecho público su malestar con que el documento llevó dos años de trabajo y que ahora no se acaba de aplicar en elementos como los encuestadores, la mendicidad, los grafitis y el ruido. "Hay que difundirlo, y eso no se hace con anagramas y subvenciones", afirmaron en un repaso de temas que tiene como objetivo mejorar, no así realizar una "crítica destructiva", según remarcó el presidente, que estuvo acompañado por otros miembros de la directiva.

"El centro no puede ser solo bares"

Los representantes de la asociación Casco Histórico también se detuvieron ayer en las condiciones para vivir que tiene en la actualidad esta zona, en la que ellos perciben la necesidad de algunas dotaciones colectivas más, como es el caso de un centro para los mayores.

"La Laguna no puede ser solo bares", expuso el presidente vecinal, Pablo Reyes, en mitad del análisis, en el que llamó a la potenciación del comercio local y en el que llegó a proponer una idea acerca de esas posibles infraestructuras para uso general: que el parquin de El Remojo pase a subterráneo y que el patio del Instituto Cabrera Pinto sea ampliado y, de ese modo, crear allí una cancha que podría ser utilizada por los jóvenes fuera del horario académico.

Lamentaron, sin embargo, en otro punto del encuentro que su colaboración no siempre es aprovechada por parte del Ayuntamiento de La Laguna. "Sentimos que se nos tiene en cuenta para algunas cositas", señaló Reyes para mostrar reducción, si bien añadió a renglón seguido que esta organización siempre ha actuado con el "afán" de ayudar.

Concursos de ideas

"Da la sensación de que no cuesta nada el dinero que no es de uno, sino del vecino". Lo dijo Pablo Reyes al referirse a los concursos de ideas del mercado y de las ruinas de San Agustín, después de que la edil de Urbanismo y Patrimonio expresase sobre el segundo que, como han pasado los años desde que fue fallado quizá las necesidades sean otras. "No se puede hacer un concurso y más tarde tirarlo todo por tierra", manifestó. Para la recova pidieron una solución.

Alegaciones del PGO

Los representantes vecinales también demandaron que se respondan las alegaciones al PGO y se centraron en la que presentaron ellos acerca del fuera de ordenación.

Accesibilidad

Se quejaron sobre aceras y calles peatonales que están por mejorar, así como de la señalización vertical que dificulta el tránsito a personas con movilidad reducida. Además, recordaron su solicitud de unos macetones delimitadores del tránsito peatonal en el último tramo de Herradores.

Fiestas

Sin omitir que hay otros asuntos más importantes, Casco Histórico lamentó el "desinterés" que aprecian con la organización de las fiestas, para las que propusieron que se cree una comisión mixta.

San Honorato

Reyes y sus compañeros rechazaron la construcción de dos edificios más de ocho plantas cada uno en pleno corazón del barrio de San Hororato, y se detuvieron en que la voluntad del grupo de gobierno de no levantarlos ha de ir más allá y ser recogida por escrito.

Parques

Criticaron en este punto la desaparición de árboles de las vías laguneras. Como ejemplos se refirieron a la calle Quintín Benito, al núcleo de San Honorato y a Lucas Vega.