María Coll, exlíder de Podemos en Tenerife, manifestó después de dimitir que la secretaria general de la formación morada en Canarias, Meri Pita, "lo soluciona todo cortando cabezas con la catana". Si tal afirmación es cierta, la nueva víctima del sable japonés es el consejero Dailos González, expulsado de su partido por destituir "a su asesor en el Cabildo de La Palma sin consultar" a los dirigentes regionales, un argumento (o disculpa) sin precedente conocido en ninguna destitución anterior.

El cese tiene un trasfondo aún mayor. A pesar de lo que se ha escrito por error durante estos días del consejero de Podemos en la institución insular, más propio de un reiterado desconocimiento, la cúpula de Podemos impuso (sí, impuso) a Dailos González la contratación de su asesor, Rodrigo Laiz, un hombre de la máxima confianza de Meri Pita. Tenía que tener nómina y, por ende, sueldo de la primera corporación "sí o sí". Y así fue. La opinión del consejero, del que iba a ser su jefe en el día a día, poco o nada tuvo que ver con el nombramiento de su administrativo.

Dailos González sí contó ciertamente con el apoyo de los dirigentes de Podemos en el comienzo de su andadura en esta formación; es decir, en su elección como candidato a la institución insular, en una estrategia planteada en Podemos que tenía como único objetivo defenestrar a la antaña secretaria insular, Mikal Rodríguez. Sin embargo, con el devenir de la legislatura, el consejero se fue alejando claramente de las directrices de Meri Pita, lo mismo que ha ocurrido con decenas de representantes de este grupo, teniendo mucha más afinidad con el sector ligado a Sí Se Puede, que no ha perdido el tiempo en emitir un comunicado en su defensa.

Por el contrario, en la lucha interna que se ha vivido en la formación morada, Rodrigo Laiz ha seguido siendo uno de los fieles de la todavía máxima autoridad de Podemos en Canarias, al igual que su pareja sentimental, Olivia Fernández, que curiosamente, o no tanto, sería la nueva consejera de este grupo en el Cabildo palmero en caso de que Dailos Rodríguez presentara su dimisión, en otra "coincidencia" que podría explicar parte de lo que está ocurriendo.

El trabajo del consejero de Podemos en la institución insular, más social y estable de lo que desde diferentes sectores han pretendido plasmar, nunca ha contado, ni tan siquiera al principio, con el apoyo o beneplácito de la cúpula de esta formación en Canarias. Es más, su labor no ha sido difundida por sus propios compañeros, en un intento por "apagarlo", por darle la espalda y forzarlo a dimitir, aunque el hecho concreto que ha acabado por dejarlo aislado fue su decisión de destituir a Rodríguez Laiz como asesor.

Y tiene "tela". Dailos González no podía más. Se sentía incluso presionado por aquel que debía ser su apoyo en el trabajo diario. Estaba al límite y decidió quedarse sin asesor. Un dato: ni tan siquiera ha aprovechado el puesto vacante, que el Cabildo mantiene en su presupuesto, para "colocar" a alguien de su entorno. Una postura que desafortunadamente no es tan común en política. Explicó entonces que Laiz nunca asumió su papel como personal de confianza, y que durante el período que estuvo en el Cabildo de La Palma desaparecieron pen drives con información personal del propio Dailos González, un presunto delito que se investiga por la vía judicial.

Y aún así, Mery Pita no atendió a ninguna de las razones expuestas por quien en realidad es la cabeza más visible de Podemos en La Palma, y decidió expulsar al consejero en defensa del asesor, Rodrigo Laiz, abriendo a la vez las posibilidades de entrar en la institución insular a Olivia Fernández.

Pese al esfuerzo por llevarlo al ostracismo, Dailos González no pretende dimitir. Al contrario, su idea es mantener el acta de consejero hasta el final de la legislatura, sobre todo siendo consciente de quién lo sustituiría en caso de dar un "portazo" y marcharse. Es más, considera que su expulsión de la formación morada es una decisión injusta e irá hasta los últimas consecuencias (la vía judicial) para defender su permanencia en Podemos. Dará "guerra".