El Ayuntamiento de La Laguna reforzará la vigilancia y la seguridad en el cementerio de San Luis después de que vecinos y usuarios del camposanto denunciaran pequeños hurtos en los nichos de sus familiares. Así lo adelantó ayer el concejal del área de Cementerios, Zebenzuí González, tras los problemas surgidos en el camposanto y tras haberlos hechos públicos algunas de las personas afectadas.

En este caso, Manuel Figueroa y su hija Tania han querido dar un paso al frente al haber comprobado que durante las últimas semanas se han llevado recuerdos, detalles y estampas del nicho donde reposa el cuerpo de Jacob, tristemente fallecido hace algo más de tres años.

Y no es la primera vez que lo ponen en conocimiento, ya que hace un año manifestaron su denuncia ante unos hechos "que nos hacen muchísimo daño. Lo último fue la desaparición de tres medallitas que dejamos en Navidad... No es el valor, sino el dolor de ver cómo algunas personas no respetan el descanso de los seres queridos", apuntó Tania, que al mirar las flores se dio cuenta, también, de que faltaban las estampitas que su padre Manuel había colocado el pasado fin de semama.

Los afectados reclaman al ayuntamiento incrementar las medidas de vigilancia para evitar en lo posible los pequeños hurtos y robos que se producen no ya solo en el cementerio de San Luis, sino el resto de camposantos del municipio. Dijeron que si bien hay cámaras, las mismas "están enfocadas a los pasillos centrales", dejando los laterales sin vigilancia, "es lo que está ocurriendo".

Al respecto, es habitual que la desaparición de recuerdos, estampas, apliques, flores frescas o plomo con el que se rellenan las letras de algunas de las lápidas, denuncian otros usuarios consultados que han sufrido este tipo de problemas.

El edil responsable, Zebenzuí González, es consciente de lo que ocurre y señaló que "el área está estudiando presupuestos para instalar más vigilancia y evitar en lo posibles estos hechos execrables. Hay personas que no saben convivir con el respeto".