El 13 de mayo de 2016 fue cuando los ayuntamientos de Candelaria, Arafo y Güímar firmaron, junto al Cabildo, la propuesta de Estatutos de la Entidad Urbanística de Conservación (EUC) del Polígono Industrial Valle de Güímar. Era la materialización de un primer acuerdo en ese sentido después de dos años de conversaciones infructuosas, aunque el documento deberá superar ahora el trámite legal establecido. Y en ese proceso están. De hecho, ocho meses después solo Arafo superó el procedimiento de exposición pública.

En ese punto, los industriales agrupados en la Asociación de Propietarios y Empresarios del Polígono Industria de Güímar presentaron las alegaciones correspondientes. En ellas, según ha podido saber EL DÍA, apuntan argumentos dirigidos a reducir su participación económica en el mantenimiento de la EUC.

La propuesta que dio lugar a los Estatutos que ya han aprobado los plenos de Candelaria, Arafo y Güímar restringe a cuatro años el periodo de vigencia de la EUC, establece en 50.000 euros al año la aportación de cada uno de los tres municipios y de 75.000 euros la del Cabildo, comprometiéndose la Corporación insular a asumir el emisario, mientras que el abastecimiento de agua desde el pozo de Chiguengue será objeto de un concurso público.

Además, la aportación del empresariado a la Entidad Urbanística de Conservación sería de 250.000 euros por ejercicio.

El colectivo empresarial ya puso con anterioridad algunos reparos a un acuerdo similar, exponiendo su preferencia por la constitución de un consorcio como la figura legal para el mantenimiento del Polígono Industrial Valle de Güímar.

"La fórmula de la autoadministración es la única que nos garantiza mantener el control sobre el precio y el costo de los mismos", advirtió en su momento el colectivo de empresarios y por ello formula alegaciones tendentes a que los servicios (recogida de basuras, limpieza viaria, abastecimiento de agua, alumbrado...) no corran riesgo alguno.

El 22 de agosto de 2015, sábado, operarios municipales de Güímar pintaron una raya azul en el Polígono Industrial para delimitar el suelo güimarero del arafero. Bastó para reactivar la constitución del órgano consensuado en su momento para gestionar el mantenimiento de la zona industrial más importante de la Isla. Ahora mismo, sus Estatutos están en exposición tanto en Candelaria como en Güímar.