Las obras en la carretera del sur se iniciaron en el verano de 2013 y la idea era que estuvieran finalizadas en mayo de 2015. La realidad: apenas está ejecutada al 33%, tal, como reconoció el vicepresidente y consejero de Obras Públicas del Gobierno de Canarias, Pablo Rodríguez, que realizó ayer su primera visita a La Palma, acompañado por el viceconsejero de Infraestructuras, el palmero Onán Cruz.
El acondicionamiento de la carretera LP-2, en el tramo San Simón-Tajuya fue adjudicada en 2012 a una UTE. La idea era inyectar a la obra una cantidad considerable de dinero cada año para finalizarla en el plazo establecido. No fue así. Al contrario, el dinero destinado ha sido escaso.
A propósito, Pablo Rodríguez asumió que "vamos retrasados en el tiempo. La inversión no ha estado acorde con las anualidades del contrato. Teníamos que haberla dotado (a la obra) de mayor capacidad financiera". El vicepresidente tiene claro el responsable del retraso: "El Estado ha incumplido el convenio de carreteras con Canarias", lo que cifró en la pérdida de unos 700 millones de euros en el último lustro.
Lo mejor para los usuarios de la vía, tanto residentes como miles de visitantes que se desplazan al sur de la Isla cada año, es que en 2017 se producirá "una inversión de 8,5 millones de euros" en esta carretera, "lo que supone duplicar el presupuesto respecto al del pasado año". Una cantidad importante de dinero, en concreto, 712.000 euros, irá destinado a expropiaciones de terrenos, principalmente en la zona de Fuencaliente, mientras que las obras a ejecutar estarán más centradas entre Los Canarios y Los Llanos de Aridane, sobre todo "en la zona de Las Manchas", señaló el consejero.
Pablo Rodríguez también se desplazó a Barlovento para conocer las obras de la carretera del Norte. La actuación es esta vía ha sido (y es) un ejemplo de lo que nunca debe ser una actuación pública: se contrató por 40 meses y ya lleva 9 años en obras; tenía un presupuesto de 32,4 millones y se ha duplicado. El Gobierno de Canarias destina ahora una partida de 2,1 millones de euros, pero el consejero de Obras Públicas dejó claro que es un dinero que se destina "a la liquidación de la obra ya ejecutada", estando aún en procesos administrativos la posibilidad de liquidar el contrato para posteriormente tasar las obras que deben ejecutarse para corregir lo que no se hizo bien. Rodríguez reconoció que contaba "con informes tanto de la Consejería como del Cabildo sobre deficiencias en esta obra".
Además, por si el vicepresidente tenía dudas, el alcalde de Barlovento, Jacob Quadri, fue contundente ayer a la hora de explicar sobre el terreno a los cargos del Gobierno de Canarias desplazados a la Isla, las actuaciones con las que su pueblo no está en absoluto de acuerdo y que deben ser solucionadas.
El vicepresidente hizo por último mención a que después de cuatro años de parálisis, Obras Públicas retomará en 2017 las obras en la LP-2 Los Llanos de Aridane-Tazacorte, en el tramo de acceso al Puerto bagañete. "Tras el parón que sufrió esta infraestructura con motivo de la falta de financiación por el incumplimiento del Estado con el convenio de carreteras, en 2017 estamos en disposición de reiniciarla".
Rodríguez dijo que "se han mantenido conversaciones con la UTE responsable y la obra cuenta con una ficha financiera de 2.2 millones, lo que nos permitirá finalizar el primer tramo e iniciar la segunda fase en la que se prevé construir un falso túnel".
A vueltas con la conexión entre Fuencaliente y El Remo
El presidente del Cabildo de La Palma, Anselmo Pestana, aprovechó la visita del vicepresidente y consejero de Obras Públicas, Pablo Rodríguez, para volver a poner sobre la mesa un proyecto del que se ha hablado durante lustros: la carretera o túnel entre la costa de Fuencaliente y El Remo, en Los Llanos de Aridane. Pestana comenzó destacando las buenas sensaciones que había obtenido de la reunión celebrada ayer, una sensación "de entendimiento y diálogo", para posteriormente hablar de la importancia de ejecutar "una infraestructura necesaria y que tiene su justificación en la comunicación de dos núcleos turísticos importantes, con recursos muy potentes para la Isla". La Isla tiene otras actuaciones prioritarias, como la carretera entre Tijarafe y Garafía o el túnel que uniría la Caldereta con la Grama, en Breña Alta, pero sin olvidar la vía de la costa del Sur que puede estar sobre los 100 millones de euros.
Convenio de carreteras entre el Estado y Canarias
Pestana dejó ver al vicepresidente la importancia de estas obras en un momento crucial: la negociación del convenio de carreteras entre el Estado y Canarias. A propósito, Pablo Rodríguez dijo que este mes de febrero habrá "contactos oficiales con Fomento" para lograr "un acuerdo que sea justo para las Islas". El objetivo es que este convenio permita en quince años "completar la red intrainsular".