Tras un periodo en el que la actividad política ha estado inmersa en un auténtico maremágnum, y pese a que determinados nubarrones hacen prever futuras tormentas, el presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, analiza en esta entrevista algunas de las cuestiones en las que trabaja su Ejecutivo con el objetivo de hacer frente al principal problema que ahora tienen las Islas, una alta tasa de paro, así como el proceso de negociación del nuevo modelo de financiación autonómica, materia clave para el desarrollo económico y sostenibilidad del Estado de bienestar del Archipiélago.

Teniendo en cuenta que después de meses de tempestad política parece que se ha entrado en una etapa de calma, ¿cuáles son las principales preocupaciones del presidente del Gobierno de Canarias?

Las mismas que al principio de la legislatura. Los retos de Canarias deben de estar ajenos a los avatares políticos y a que el descontento de los ciudadanos se haya traducido en un Parlamento más plural debido a la irrupción de nuevas fuerzas. Los objetivos son los mismos que se marcaron al principio de la legislatura. Hay uno fundamental que es el empleo, porque en la medida en que haya empleo hay más gasto, las empresas ganan más dinero, la recaudación pública sube y podemos financiar nuestro Estado de bienestar. De forma resumida, es un círculo. Ahí es donde estamos poniendo todo el empeño.

La economía canaria creció el año pasado un 3,8% y, sin embargo, el empleo...

Y el empleo un 5,6%.

Va a un ritmo...

Superior. Generalmente el empleo crece igual o un poco más que el PIB. Por eso es tan importante crecer y esa es nuestra intención. La economía canaria lo hizo el año pasado un 3,8% y el empleo un 5,6%. Con lo cual, creció por encima de la media del Estado y también del PIB.

Pero con ese...

Hay dos fenómenos. El primero es que no es suficiente para retornar a tasas de paro razonables. Ahora mismo tenemos un 24,9% de desempleo. Ya hemos salido del vagón de cola y hay dos comunidades, Extremadura y Andalucía, detrás de nosotros. Ese es un buen síntoma, pero continúa siendo claramente insuficiente, pues seguimos teniendo una tasa de paro desmesurada. Por otro lado, a nosotros nos gustaría poder crecer más, pero en 2017 tenemos que ser prudentes, porque hay más inflación...

Las previsiones de crecimiento del PIB son menores...

Sí, un 2,7%. El Ceprede -Centro de Predicción Económica- dice que somos la comunidad autónoma que más va a crecer de toda España en 2017. Es un buen síntoma de que las cosas se están haciendo razonablemente bien, por todos, no solo por el Gobierno de Canarias, también los empresarios y los agentes sociales, pero así y todo vamos a estar casi un punto por debajo del año pasado. Se va a continuar creando empleo, pero no al ritmo que queríamos.

Según una serie de estudios publicados estos días, en seis años los hoteles y apartamentos han creado 15.300 empleos. ¿Es poco?

No podemos pedirle todo al turismo. Este subsector ha generado empleo durante toda la crisis, lo que pasa es que no ha sido capaz de absorber la destrucción que se generó en la construcción o en el sector servicios. Tenemos que ser conscientes de que esta es la actividad líder de nuestro crecimiento económico, de nuestra economía, y a los líderes se les exige más que al resto, pero no podemos ser injustos.

El programa "Crecer juntos", que trata de aprovechar el tirón del turismo en otros sectores, ¿está dando resultados?

Sí. El otro día presentamos los datos del primer año y las ventas de vino, por ejemplo, se han incrementado en un 400%. El sector primario, que había estado cayendo de forma sistemática, ha crecido por encima de un 3%, con lo cual, no solo se ha parado la caída, sino que ha permitido crecer un poco.

¿Es consciente del problema que tiene el turismo con la cualificación de los trabajadores?

Sí. El principal es el del idioma y, por eso, el año pasado anuncié el incremento de la contratación de auxiliares de idioma, porque es en la edad temprana donde tienen que empezar a trabajar con los niños. Este año hemos puestos 43 millones de euros más en el presupuesto de Educación, porque queremos fijar una estrategia clara para llegar dentro de diez o doce años a la enseñanza bilingüe.

¿Cómo ve la caída del gasto por parte de los turistas británicos que visitan las Islas?

El gasto en destino ha descendido un poco, pero por la devaluación de la libra.

¿Teme que con el "brexit" se agrave esta situación?

No lo tememos, pero lo tenemos en observación, pues, por varias cuestiones, no podemos mirar para otro lado. Realmente el impacto en el turismo, en cuanto a reservas y el número de visitantes, no ha afectado. Todo lo contrario, subieron. Sí es cierto que estamos viendo que están gastando menos y se quedan menos noches, con lo cual se está compensando una cosa con la otra. Son casi cinco millones los británicos que nos visitan cada año, un tercio del turismo que viene a Canarias, y además es el más sensible al precio.

¿Hay margen para captar mercados alternativos?

Sí, y estamos trabajando en ello. Creo que se nos abre una oportunidad con los americanos, porque si se recrudece la política de Donald Trump con México, que es, junto al Caribe, el destino turístico elegido mayoritariamente por la población de EEUU, se nos puede abrir una vía.

¿Ha hecho el mercado turístico sus deberes para afrontar el día después de un boom que tiene fecha de caducidad?

No hemos estado a la altura ninguno. Y cuando digo ninguno me refiero principalmente a la administración del Gobierno de Canarias que yo presido. Si hubiésemos tenido muchas más facilidades para la recualificación, instrumentos urbanísticos más ágiles, el sector privado, que tiene reserva de inversiones canarias que invertir, podría haber ido más rápido. Han sido precisamente las trabas burocráticas del Gobierno las que han impedido algo que ahora queremos solucionar con la Ley del Suelo.

Y ahora...

Por otro lado, ya que la crisis no lo permitió antes, con el Fondo de Desarrollo de Canarias (Fdcan) también queremos intervenir en las zonas públicas.

La nueva financiación universitaria plantea a la ULL y a la ULPGC mejoras en determinados indicadores. ¿En qué considera usted que tienen que mejorar?

Poco a poco la universidad se tiene que ir adaptando. El sistema educativo tiene como misión tener una sociedad más culta, más libre, más independiente, pero también tiene como función nutrir al sector productivo de los recursos humanos.

¿Ahora no ocurre así?

Durante mucho tiempo, y ese es el proyecto Enlaza con Formación Profesional, en el que estamos metido a tope, el sistema educativo ha ido por un lado y el productivo por otro. Y eso lo que genera es frustración. Primero porque educas e inviertes recursos en personas que luego no tienen cabida en el mercado laboral canario y se tienen que ir fuera. Por otro lado, frustras al empresario que no encuentra en el mercado local los trabajadores que necesita, con la formación que precisa, y acaba trayéndolos de fuera. Eso ocurre mucho en Canarias y sube la población activa. Puedes estar generando empleo, pero no lo están ocupando los de aquí, sino otros porque aquí no encuentras. Lo que estamos tratando es de casar ambos sistemas.

¿En que fase se encuentran?

Estamos con la Formación Profesional. Nos hemos fijado en el sistema del País Vasco. El universitario es más independiente y complicado. Ahí estamos trabajando en la futura financiación.

¿Irá en la línea de adaptarse al mercado laboral?

Claro. Tenemos que ir de la mano. Nosotros queremos dotar a la universidad de un sistema de financiación estable, justo, y en eso estamos de acuerdo con los rectores, pero si invertimos dinero público también queremos ver para qué y con qué objetivos.

La Ley canaria de Educación exige destinar el 5% del PIB a esta materia en 2022. ¿Se logrará?

Estamos lejos. Va a depender de la financiación autonómica, porque con el modelo actual recibimos 700 millones de euros menos al año, que nos corresponderían por población y por recursos. Con ese dinero sí se podría alcanzar.

Ya que habla de financiación, ¿se arrepiente de haber anunciado la llegada de 400 millones a Canarias sin tener cerrado el acuerdo?

No. Vamos a ver, el tema está cerrado en la agenda canaria, la novedad es...

Depende de la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado.

Claro. Para este asunto hay tres vías. La primera es la de los presupuestos, derogando la disposición adicional segunda. La segunda, la de un Real Decreto, y la tercera, la reforma del sistema de financiación. Esta última va a ser complicada y ardua. La del presupuesto, que es la que deseamos, es la más inmediata, y si no, la de un Real Decreto. No obstante es un acuerdo firmado con Pedro Sánchez, cuando era secretario general del PSOE, y posteriormente con Mariano Rajoy, las dos fuerzas mayoritarias del Congreso. Si son coherentes con lo que firmaron y cumplen con su palabra, está hecho.

¿Confía en que Canarias salga beneficiada de la revisión del sistema de financiación autonómica, teniendo en cuenta que no se va a meter más dinero?

Más dinero no va a haber y, además, durante un tiempo. Lo único que pido es que Canarias sea tratada con justicia, al igual que el resto. Hemos conseguido colocar el coste efectivo de los servicios, con esa premisa ya se parte de una posición más favorable. A partir de ahí, las negociaciones depende de cómo vaya el resto.

Entonces saldremos...

Vamos a ver. Tras conseguir los 400 millones, seguimos teniendo un déficit de 300. Confío en poder recuperarlos solo con el tratamiento del coste efectivo.

¿Es Fernando Clavijo un presidente en el que se pueda confiar?

A mí no me lo puede preguntar, porque qué voy a decir yo. Tengo una trayectoria de gestión pública, no tremendamente dilatada, vinculada al Ayuntamiento de La Laguna, y los que me conocen podrán decir si soy o no de fiar.

¿Cómo se le quedó el cuerpo al leer que uno de los miembros de su anterior Gobierno apuntaba que usted no es de fiar?

Entiendo que esas declaraciones están hechas quizás un poco desde el rencor y el despecho. Porque ¿quién es más de fiar, el que se queda en su puesto de trabajo y cumple por lo que se le paga y no se levanta de los sitios o el que se va inexplicablemente hasta en tres ocasiones del Consejo de Gobierno, haciendo dejación de funciones? Los actos hablan por sí mismos.

¿Está satisfecho con el resultado del Festival Internacional de Música de Canarias?

Corresponde a la consejera de Cultura realizar la valoración de un festival que ha cambiado y en el que seguro se han hecho cosas mejores y cosas peores. A partir de ahí, habrá que hacer una evaluación y aprender de los errores para no cometerlos en el futuro.

"Incapaces de mantener la disciplina interna"

¿Qué le parece lo ocurrido en Tacoronte con el "fichaje" de un concejal de Si se Puede por parte del alcalde, Álvaro Dávila (CC)? El alcalde está intentando apuntalar una mayoría y reforzar su equipo de gobierno. Las personas que quieran participar y contribuir al desarrollo de Tacoronte, bienvenidas sean. Quizás a lo mejor la reflexión la tienen que hacer aquellos partidos que no son capaces de mantener la disciplina interna. ¿No considera que este tipo de comportamientos ayudan más bien poco a mejorar la imagen de una actividad política ya bastante desacreditada? Pero ¿por qué? El hecho de que se pase un solo concejal es cuanto menos llamativo. Pero ¿quién tiene el problema, el alcalde o el partido político? No se trata de un problema del alcalde ni del concejal que se incorpora al equipo de gobierno, sino más general, entre otras cosas porque ha dado pie a que se hable de prácticas mafiosas. Lo normal es que haya acuerdos entre partidos. Eso sería lo razonable y lo normal. En cuanto a prácticas mafiosas, echar a un consejero de un cabildo porque no contrata a la mujer del siguiente de la lista o manipular las cuentas de correos de ONG para influir en los procesos de elecciones internas de los partidos... con luz y taquígrafos: hay un concejal que quiere incorporarse al equipo de gobierno y un alcalde que está en una situación de minoría y le dice: "Si quieres venir, por supuesto a contribuir". Pero quienes lo califican lo que tienen que ver es cómo actúan de manera interna. ¿Positivo? No es positivo. ¿El espectáculo que se da es gratificante? En absoluto. Por eso, los partidos que tienen una implantación nacional fuerte a lo mejor deberían trabajar por implantar las listas abiertas para que los ciudadanos voten a las personas que quieran. Porque claro, al final nos encontramos con un sistema legal donde el acta de concejal es de la persona, pero la lista te la hace el partido.