La mayoría de las instalaciones de energías renovables generan "muy poca economía" para Canarias, una proporción que en el caso de la fotovoltaica supera por poco el 10%. La advertencia la lanzó el pasado lunes Ricardo Guerrero, director del máster que ofrece en esta materia la Universidad de La Laguna (ULL), durante la sesión inaugural del seminario Planeta Tierra de la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Tenerife. El panorama descrito por Guerrero es el de una región en la que las políticas de renovables no siempre se han desarrollado con los criterios adecuados y que ha privilegiado las instalaciones de gran potencia -en su mayor parte, de capital procedente de fuera de las Islas- frente a las que podrían ser más beneficiosas para pequeños empresarios y familias. Su intervención dejó datos que certifican que las Islas tienen un potencial desaprovechado, como el que proporcionan los 78 kilómetros cuadrados de tejados y cubiertas "ociosos" que podrían acoger placas fotovoltaicas.

La cifra, que consta en los registros de la empresa pública Grafcan, revela el camino que queda para impulsar lo que Guerrero llama "la pequeña renovable", aquella capaz de crear economía para los isleños y cuyo ámbito de instalación se concentra, sobre todo, en las áreas urbanas. Este es el espacio adecuado para la energía fotovoltaica, una fuente de generación que, sin embargo, se mantiene estancada en el Archipiélago.

El argumento empleado para cuestionar el crecimiento de fotovoltaica en tejados y cubiertas es de carácter económico, pero Guerrero no lo comparte. "Los precios en techo y en suelo tienden a converger y, además, supone un ahorro en redes de transporte". La posibilidad de tener "muchos sistemas repartidos" reduce, por otra parte, la exposición ante los fallos, agrega el investigador.

No toda la superficie sin usar -esos 78 kilómetros cuadrados, sin considerar los invernaderos- está preparada para acoger instalaciones de energías alternativas, pero eso es, a juicio de Guerrero, "casi una anécdota" en comparación con la magnitud de este potencial.

El caso de Hawai, donde casi el 25% de la energía procede de renovables y en el que el 30% de los tejados de una isla (Oahu) tienen fotovoltaica, es el ejemplo que Canarias debe seguir. La regulación para agilizar el uso de las cubiertas de las comunidades de propietarios es un paso que ha de darse para avanzar en este aspecto, destaca el director del máster.

La falta de experiencia en fotovoltaica de Red Eléctrica (REE), operador del sistema eléctrico, explica también el retraso en esta materia, aunque Guerrero admite que esta situación está cambiando.

Las trabas al autoconsumo energético son otra carga para la generalización de las renovables. "Gravar el autoconsumo y el balance neto es como gravar comprarte una nevera más eficiente", argumenta Guerrero, quien advierte de que, para "no tener un problema en el futuro, debería existir un derecho inalienable de cada consumidor a poder producir su propia energía".

La intervención de Ricardo Guerrero en el seminario Planeta Tierra, organizado por la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Tenerife, permitió ver el camino que debe recorrer, a juicio del investigador, la planificación energética del Archipiélago. Las instalaciones eólicas no han encajado hasta ahora en la idea de "pequeña renovable" que Guerrero defiende para crear economía en la región.

En cualquier caso, el futuro de esta tecnología será "flotante", advierte el director del máster de Energías Renovables de la ULL en relación a los ensayos que permiten colocar aerogeneradores en el mar sin necesidad de cimentación, lo que podría ser una alternativa para Canarias, donde la elevada profundidad de las aguas dificulta las instalaciones "off shore".

Entre las reflexiones aportadas por Guerrero figura la de realizar un "análisis" sobre la central hidroeólica de Gorona del Viento, en El Hierro, un sistema eléctrico "novedoso" que se ha convertido "de largo" en el más caro de España. Esto no significa, matiza, que haya que ignorar la "oportunidad" que ofrecen los bombeos en las Islas.

El docente reclama una mayor participación de las universidades en las reuniones de REE con el sector eléctrico -"somos buenos instrumentos para la defensa del interés general", apunta-, al tiempo que sugiere la necesidad de mejorar los procedimientos y conocimientos de los funcionarios para "afrontar una instalación más ágil de renovables".

El gas natural -una "herramienta barata de integración de renovables"-, el coche eléctrico -que tiene "todo el sentido" en un territorio como Canarias- y la posibilidad de convertir la refinería de Cepsa en una "biorrefinería" también aparecieron en la charla de Guerrero.