Las ayudas privadas a ONG han aumentado un 30% entre 2013 y 2015, mientras que los fondos públicos presentan las cifras más bajas de los últimos diez años, según el último balance de la Coordinadora de ONG de Desarrollo (CONGD) presentado ayer, sobre donaciones y empleos de las ONG españolas.

Más de 2,4 millones de personas contribuyen de alguna manera al trabajo que realizan las ONG de desarrollo españolas, un 20% más que en 2008, de las que 20.000 son voluntarios.

Las ONG trabajan con 35 millones de personas en 105 países del mundo, realizan 3.600 proyectos y ejecutan 550 millones de euros, indica el informe en su balance, "a pesar de la crisis sostenida y los enormes recortes sufridos en cooperación".

El Informe del Sector de las ONG de desarrollo 2016 desgrana los datos más recientes (2014-2015) de las 76 ONG que integran la coordinadora -como Ayuda en Acción, Cáritas, Acción contra el Hambre y Médicos del Mundo- y de sus 17 coordinadoras autonómicas.

"El apoyo público a la cooperación es crucial en un contexto internacional en el que importantes crisis humanitarias y graves problemas de desarrollo, desigualdad y medioambiente, afectan a todo el planeta", señala.

En concreto, los fondos privados obtenidos en 2015 ascendieron a casi 300 millones de euros, una cifra que contrasta con los menos de 200 millones en los que se sitúan las contribuciones públicas.

"La fotografía arroja la imagen de una solidaridad ciudadana que está por encima de los compromisos políticos con la cooperación", expresa la coordinadora.

Para la CONGD, este aumento del apoyo de los particulares a las ONG de desarrollo plantea a "la administración pública el reto de ponerse a la altura de la solidaridad ciudadana".

El informe recuerda que, según el último Eurobarómetro, el 93% de la población española apoya la cooperación, lo que obliga a los responsables públicos a secundar esta voluntad de solidaridad.

La crisis golpea más a los niños pobres que a los ricos

La crisis ha golpeado cinco veces más a los niños que menos tienen que a los más ricos, y mientras unos perdieron el 32% de sus recursos, los otros solo los disminuyeron un 6%, según Save the Children, que augura que ocho de cada diez de esos menores continuarán siendo pobres toda su vida. Esta diferencia está directamente ligada al empleo de sus padres. De hecho, España es el país donde más ha crecido el número de niños que viven en hogares donde nadie trabaja, hasta llegar a los 800.000, según el informe "Desheredados. Desigualdad infantil, igualdad de oportunidades y políticas públicas en España".

España, entre los países donde más aumenta la desigualdad

El documento pone de manifiesto que España es el sexto país de la UE con mayor desigualdad, que se ha cebado principalmente con la infancia: entre 2008 y 2015, la cifra de niños en situación de pobreza severa aumentó en 424.000. De esta forma, la tasa se situó en un 16,7% frente al 11,2% de la población general. Y no solo es donde más se ha incrementado, sino también donde lo ha hecho con una mayor rapidez. Entre 2008 y 2014 el índice de Gini, que mide el grado de desigualdad, se disparó un 7,1%, mientras que en Grecia lo hizo un 3,3% y en Alemania un 1,7%.