Quién sabe si los anglicismos "touchdown" -anotación- o "quarterback" -jugador de ataque- se podrán escuchar con mayor frecuencia en los recintos deportivos canarios a partir de ahora. Ayer se celebró el primer partido de la primera Liga Canaria de Fútbol Americano. En un campo de Montaña Pacho -La Laguna-, los Templar Tackle de Gran Canaria batieron por 14-22 a los Seaknights de Tenerife, en un duelo que, pese a la meteorología, siguieron más de un centenar de aficionados.

En esta primera jornada descansó el otro equipo de la competición. Se trata del Pegasos Tenerife, quien entrará en liza en la segunda fecha -12 de marzo-, con el derbi frente a los Seaknights, aún sin emplazamiento concretado al efecto. Y es que el torneo se desarrolla con unas condiciones precarias -las marcas del campo fueron señaladas con distintos objetos-. Es cierto que este se desarrolla bajo el paraguas de la Federación Española de Fútbol Americano -FEFA-, aunque no lo es menos que el ente nacional solo se ocupa de recaudar el montante económico de las fichas y organizar los seguros médicos de los clubes. De hecho, no existe Federación Canaria alguna y son las tres entidades implicadas las que se encargan de todo lo demás. Esto supone un importante desembolso económico. La propia FEFA les exige la presencia de ambulancia en cada encuentro. Ayer estuvo y fue abonada por los implicados.

A pesar de las trabas, los partícipes irradian ilusión por un deporte que a muchos les cuesta entender. Simplificando sus reglas, consiste en el encuentro de dos equipos de once jugadores -nueve contra nueve en la Liga Canaria- en un campo de juego con una longitud de 100 yardas -80 en la Canaria-, divididas en 10 partes iguales y marcadas sobre el terreno, y durante cuatro periodos de 15 minutos. El objetivo es llevar la pelota ovalada hasta el otro extremo del campo para anotar, mientras el contrario intenta impedir el avance. Cada escuadra tiene cuatro oportunidades para avanzar 10 yardas. Si se consigue cubrir 10 yardas o más, se dispone de otras cuatro oportunidades para mover el balón hacia adelante.

El acento canario está asegurado.