Miles de ciudadanos se manifestaron ayer en más de 30 ciudades españolas para mostrar su apoyo a los refugiados y pedir "de forma inmediata y cuanto antes" que se traigan a España a los que están "varados" en Grecia, Italia, o "a las puertas de Europa".

Así lo expresó durante la concentración en Madrid, donde se reunieron alrededor de medio millar de personas frente a la sede del Ministerio de Exteriores, Estrella Galán, secretaria general de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado, quien, además, recordó que España se comprometió a traer a 17.300 personas y "hasta el momento" solo han llegado "algo menos de 1.140."

"Nuestra valoración [sobre esta cifra] es que llevamos un año mirando hacia otro lado, viendo cómo pasaba el tiempo, incluso viendo cómo se hacía un escaqueo de las responsabilidades", expresó. "Aunque se ha empezado a traer grupos, no vamos con la suficiente agilidad que deberíamos tener porque son familias y familias las que están huyendo del horror y necesitan un hogar", añadió la portavoz del colectivo.

La convocatoria de Madrid, que al igual que el resto de ciudades se celebró bajo el lema "No a la Europa Fortaleza, acogida Ya", fue secundada por más de 70 organizaciones sociales que convocaron marchas en otras ciudades como Zaragoza, San Sebastián, Pamplona, Alicante, Barcelona, Córdoba, Ceuta, Oviedo, Valencia o Salamanca, entre otras.

Así, en el centro de Zaragoza, varios cientos de personas recorrieron las calles para reclamar la habilitación de rutas seguras para las personas que huyen de la guerra, al tiempo que exigieron a los gobiernos que pongan fin a esta "barbarie" de la que Europa está siendo testigo.

Los asistentes llevaron pancartas con "NoEurofortaleza" o "Bienvenidos Refugiados. No al acuerdo de la vergüenza", y exclamaron durante la marcha "Basta ya de impunidad", "Abrid las fronteras, queremos acoger" o "La guerra mata, Europa remata", gritos que también se escucharon en Huesca o Teruel.

En San Sebastián, cientos de personas reclamaron que se facilite la acogida de refugiados, y desplegaron una pancarta con el lema en euskera: "Bienvenidos refugiados, solidaridad. Pasaje Seguro. Traed a vuestras familias".

Entre los congregados se encontraban miembros de Podemos, además de personas de distintas nacionalidades, algunas de ellas procedentes de Eritrea, Guinea Ecuatorial, Siria y Afganistán. Por su parte, el drama que viven los refugiados fue escenificado en Pamplona en una manifestación de las Iniciativas Ciudadanas de Acogida en Navarra, en la que se defendió el "derecho a migrar para todas las personas, ser acogidas en condiciones y con todos los derechos". En ese caso, varios cientos de ciudadanos recorrieron el centro de la capital navarra coreando consignas como "Ninguna persona es ilegal", "No son muertes, son asesinatos" o "España tiene las manos manchadas".