Canarias se situó, según datos de 2015 que publica hoy el Instituto Nacional de Estadística (INE), entre las comunidades con una tasa bruta de mortalidad más baja por cada 100.000 habitante (710,1 fallecidos), después de Ceuta (596,6) y Melilla (609,4).

La media nacional se situó en los 910,5 fallecidos por 100.000 habitantes y las tasas más alta correspondieron a las comunidades autónomas de Principado de Asturias (1.297,8 decesos), Castilla y León (1.189) y Galicia (1.162,8).

Según la encuesta "Defunciones según la causa de muerte" de 2015, que difunde hoy el INE, las tasas brutas de mortalidad fueron más elevadas en los territorios envejecidos, ya que normalmente hay más defunciones por el efecto de la estructura de la población por edad.

La encuesta refleja que, en el conjunto del país, las muertes por suicidio descendieron en 2015 hasta los 3.602 fallecidos, un 7,9 % menos que el año anterior, pero todavía duplican el número de decesos por accidente de tráfico, que creció un 0,4 % hasta 1.880.

En total, 15.079 personas fallecieron en 2015 por causas externas -suicidio, caídas accidentales, ahogamiento y accidentes de tráfico-, que tras un incremento del 1,2 %, registró la cifra más alta desde 2008.

Las caídas accidentales se cobraron 2.783 vidas y el ahogamiento, con un aumento del 12,7 %, provocó 2.672 fallecidos.

El año 2015 cerró en toda España con la muerte de 422.568 personas, un 6,8 % más que un año antes, una cifra que pulverizó la serie histórica del INE que data de 1980 y que se explica por el progresivo envejecimiento de la población.

Así, la mayoría de las defunciones (407.489, el 96,4 % del total) se debieron a causas naturales (enfermedades), tras un aumento del 7 % en toda España.

Entre las causas de muerte, las enfermedades del sistema circulatorio mantienen el primer puesto con 124.197 fallecidos (29,4 % del total), seguidas por los tumores, que crecen un 1 % hasta alcanzar los 111.381 muertos, y las enfermedades del sistema respiratorio, con 51.848 difuntos.

El INE destaca el aumento de fallecidos en los principales motivos de defunción, especialmente en las enfermedades del sistema respiratorio, que aumentan su mortalidad un 18,3 % respecto a 2014.

Por sexos, los tumores son la primera causa de muerte para los hombres (297 fallecidos) y la segunda en mujeres (184,9).

Y las enfermedades del sistema circulatorio repiten como primera causa de fallecimiento para ellas (286,9) y la segunda para los varones (247,6).

En cuanto a la edad, el principal motivo de defunción para los menores de un año fueron las afecciones perinatales y las malformaciones congénitas (79,7 % de los fallecidos).

Los tumores fueron la primera causa para los grupos de edad de 1 a 14 años y los de 40 a 79 años, con un 29,4 % y un 43,1 % de su total, respectivamente.

De entre 15 y 39 años, un mayor porcentaje falleció debido a causas externas (38,5 %), mientras que la mayoría de muertes de los mayores de 79 años fueron causadas por enfermedades del sistema circulatorio (33,9 %).

En el detalle, las enfermedades circulatorias que provocaron un mayor número de muertes fueron las isquémicas del corazón (infarto, angina de pecho) y las cerebrovasculares, que aumentaron un 3,7 y 3,1 por ciento, respectivamente.

Entre los tumores, el más mortal volvió a ser el cáncer de bronquios y pulmón, que aumentó un 1,6 % y ocasionó 21.596 fallecidos, seguido por el de colon, que cayó su mortalidad 2,3 %.

Para las mujeres, el más mortífero fue el de mama, que provocó 6.235 fallecidas (además de 75 hombres), con un alza del 0,1 %.

El principal incremento respecto a 2014 entre las causas de muerte más frecuentes se dio en la neumonía, que creció un 20 % para los varones y un 21,8 % para las mujeres, y la demencia (incluye la vascular y la senil pero no las enfermedades del sistema nervioso como el Alzheimer), que subió más de un 14 por ciento.