El Cabildo de Tenerife será la administración encargada de financiar, licitar y ejecutar el cierre del anillo insular de carreteras, mientras que el Gobierno de Canarias, que tiene las competencias en infraestructuras de interés regional como esta, se encargará de dirigir y supervisar la obra.

Este acuerdo fue anunciado ayer por el vicepresidente del Gobierno de Canarias y consejero de Obras Públicas y Transportes, Pablo Rodríguez, y el presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, y queda pendiente de la redacción de un convenio entre las dos administraciones para concretar los términos legales.

"Es lo mismo que propusimos en agosto de 2016. Entonces no se aceptó, pero ahora es una etapa distinta y se están dando los pasos para hacerlo", dijo Carlos Alonso tras la reunión.

La propuesta del Cabildo para ejecutar la obra "se fue complicando por distintas razones", pero ahora se ha retomado, apuntó.

Alonso explicó que la mitad del coste del cierre del anillo, presupuestado en unos 300 millones, se financiará con fondos del Cabildo y la otra mitad con cargo a la parte del Fondo de Desarrollo de Canarias (Fdcan) cedido por el Gobierno a la insular.

Por lo tanto, además de firmar un convenio con el ejecutivo regional para resolver la distribución de las competencias, será necesario también modificar el convenio del Fdcan con el Gobierno de Canarias para acomodar el cierre del anillo insular en esa financiación.

Otro requisito será actualizar el proyecto técnico inicial, tarea que corresponde a la Comunidad.

Alonso confió en que antes de fin de año pueda licitarse la obra del anillo insular. Señaló que los problemas de infraestructuras de la isla solo se pueden resolver mediante la colaboración de todas las administraciones y ese es el camino que se va a seguir.

Pablo Rodríguez dijo que el acuerdo alcanzado es "de sentido común", ya que el Cabildo dispone de los fondos para el cierre del Anillo Insular, de manera que el Gobierno tiene que buscar la fórmula para que pueda llevarlo a cabo.

Colaboración en las autopistas TF-1 y TF-5

En la reunión mantenida entre el consejero de Obras Públicas y Transportes y el presidente del Cabildo de Tenerife, Pablo Rodríguez y Carlos Alonso, respectivamente, también se acordó que la Consejería de Obras Públicas del Gobierno de Canarias encargará los proyectos para la creación del tercer carril en la autopista TF-1, en el sur de la isla, y para construir un carril bus-vao en la TF-5, en el norte, actuaciones que se financiarán con cargo al próximo convenio de carreteras con el Estado, pendiente de negociar, explicaron los asistentes a la reunión.

Se acordó además actualizar el proyecto del enlace Chafiras-Oroteanda con el objetivo de poder licitarlo antes de fin de año, obra incluida en el vigente convenio de carreteras.

Otros acuerdos se refieren a trabajos más a corto plazo en la autopista del Norte, que también son competencia del Gobierno de Canarias, pero este ha autorizado al Cabildo a realizarlos bajo su supervisión y que se financiarán con fondos a cargo del Fdcan.

Se trata del tercer carril entre Los Rodeos y Guamasa y la ampliación de la plataforma en Buen Paso, en Icod, para mejorar el trafico pesado.