El Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma construyó el polémico armario eléctrico en la avenida Marítima, con un coste de 7.490 euros, sin contar con la autorización necesaria de la Comisión de Patrimonio Histórico del Cabildo de La Palma, que ahora ha dictaminado que debe reubicarse en otro espacio.

El edil responsable de Obras, Manuel Abrante, ya había reconocido en sesión plenaria que la obra se hizo sin contar con todos los parabienes, por la necesidad urgente que había de tener fluido eléctrico para la celebración de los Carnavales.

En el dictamen de Patrimonio Histórico, que adelantó ayer tvlapalma.com, informa de forma desfavorable "por unanimidad de todos los miembros" de la obra realizada, ya que el "armario" de instalaciones eléctricas "es un elemento distorsionador de la fisionomía histórica del Casco Histórico de Santa Cruz de La Palma".

De igual forma, hace hincapié en que "la intervención efectuada resulta inadecuada, debiendo reubicarse en otro espacio y en las condiciones establecidas en la ordenanza reguladora de protección artística del casco".

Resulta curioso que en el informe municipal para justificar la obra, el técnico que lo firma admita que la actuación afecta al conjunto histórico y que incumple las características y normativa establecida por ley para su localización.

La primera reacción ante el informe de Patrimonio no se ha hecho esperar, y desde Ciudadanos se reclama que sea el concejal de Obras el que asuma con su dinero los gastos ocasionados por esta construcción ilegal.