El actual primer ministro de Holanda, el liberal Mark Rutte, cuyo partido fue el más votado en las elecciones legislativas del pasado día 15, declaró hoy que intentará formar una coalición "estable" de cuatro partidos para gobernar el país.

Tras reunirse con la ministra de Sanidad y negociadora para formar Ejecutivo en los Países Bajos, Edith Schippers, Rutte, dijo a la prensa que cumplirá con su promesa electoral de no pedir apoyo al líder de la ultraderecha Geert Wilders, quien quedó en segundo lugar en los comicios, aunque bastante lejos del partido liberal VVD.

Según informó el portal "Dutch News", Rutte indicó que la opción más factible es formar Gobierno con los cristiano-demócratas del CDA y con los liberal-demócratas del partido D66, a los que intentará sumar el respaldo de un cuarto partido, que podría ser el socialista SP, los cristianos del ChristenUnie, los ecologistas de GroenLinks o los laboristas del PvdA.

"Todos estos partidos tienen ventajas y desventajas", declaró Rutte, que parte de cinco premisas para su futuro gobierno: reducir los impuestos para las clases medias, aumentar la inversión en servicios para las personas mayores, cambiar de la energía fósil a la energía renovable, mejorar las condiciones de los trabajadores y elevar el gasto en defensa y seguridad.

Por su parte Wilders, consideró que "no es democrático" excluir a su partido y a sus 1,3 millones de votantes de las conversaciones para formar Ejecutivo.

La negociadora Schippers mantendrá reuniones hoy con los 13 partidos que obtuvieron representación parlamentaria en los comicios del día 15 y el próximo jueves el Parlamento debatirá sobre los contactos para la formación de gobierno.