Un total de 11.266 alumnos canarios cuentan este curso con ayudas para poder estudiar en la Universidad. Además, de los 6.166 estudiantes que cumplen con los requisitos para obtener la beca del Ministerio de Educación, la Consejería ha otorgado 5.100 más para cubrir las necesidades de los jóvenes con menos recursos, según datos oficiales.

El Boletín Oficial de Canarias publicó esta semana la resolución de las últimas 3.662 solicitudes de beca. En total, más de 16.000 jóvenes han intentado acceder a una ayuda.

El director general de Universidades del Gobierno regional, Ciro Gutiérrez, destacó ayer que la convocatoria de ayudas se ha resuelto con unos tres meses de antelación con respecto al curso anterior y que la Administración está trabajando para que el próximo año esta fecha se adelante aún más. "Nuestro objetivo es seguir avanzando en la mejora de los plazos", aseguró Gutiérrez.

Además, la Dirección General de Universidades quiere mejorar la coordinación de la política de becas con el resto de administraciones implicadas en la mejora del acceso a la educación superior. "Queremos que los cabildos complementen las becas de la Consejería de la misma forma que la Consejería lo hace con las del Ministerio", subrayó. Para ello, el director planea una reunión con la Federación Canaria de Islas (Fecai).

Para poner un ejemplo del alcance de las becas de la Consejería, el director general explicó que "una familia de cuatro miembros con una renta anual de 40.000 euros recibe beca".

Las denegaciones de solicitudes respondieron a motivos académicos, económicos o de falta de documentación; entre ellos, 1.491 estudiantes que no tenían el mínimo de créditos superados en el curso anterior, 1.409 que superaban los umbrales de renta y 454 que no habían acreditado toda la información fiscal requerida. Además, en algunos casos, los solicitantes no cumplían varios de los requisitos.

El dinero sobrante, una vez que finalice todo el proceso administrativo, se destinará a cubrir la matrícula de alumnos que se quedaron muy cerca de entrar dentro del cupo de beneficiarios.

La Consejería tiene acceso directo a los datos académicos de los solicitantes de las dos universidades públicas canarias, lo que facilita la resolución de estas ayudas frente a las de los alumnos que proceden de otros centros.

Aunque Canarias está entre las comunidades donde las tasas académicas son más bajas, la intención del Gobierno regional es reducirlas en lo posible el próximo curso. El director general de Universidades cree que aún hay margen para rebajar el precio del crédito y abaratar el coste de la matrícula. "Estamos entre las universidades con los precios más bajos, pero creemos que todavía hay posibilidades de mejora, quizás en los estudios de máster", planteó.