Un ensayo general "casi ya con todo". Así será la apertura con motivo del Plenilunio el próximo sábado día 8 del Palacio de Carta, la única muestra del siglo XVIII, época de su construcción, que permanece en el entorno de la plaza de la Candelaria, donde se ubica. Como ya ha ocurrido los últimos años, allí se representarán distintas piezas teatrales clásicas para todos los públicos. Exactamente eso, su apertura a los chicharreros y a los visitantes de la ciudad es lo que busca la cesión del edificio desde el Gobierno de Canarias al Ayuntamiento de Santa Cruz, un proceso que se encuentra actualmente en periodo de exposición pública para presentar alegaciones. El arquitecto Carlos Pallés ha culminado el Plan Director que será la base para los nuevos usos del edificio.

En el documento elaborado, Pallés analiza la complejidad del conjunto monumental, propone un programa de usos y define una propuesta de intervención sobre el patrimonio arquitectónico.

Incide Pallés en la recuperación de elementos degradados tanto exteriores como interiores. Y divide en tres partes el programa de actuación: restauración, rehabilitación y posterior adaptación al uso propuesto.

Define las medidas urgentes e inmediatas -frenar la degradación de la madera estructural atacada por insectos xilófagos o las humedades de las cubiertas-, desarrolla un conocimiento profundo del Palacio de Carta y establece los criterios de intervención y un plan de etapas para la misma.

Pallés, chicharrero de El Toscal, heredó la pasión por la historia y por las imágenes más o menos antiguas de la ciudad de sus progenitores: Olga Darias, que fuera redactora de La Tarde, y Antonio Pallés, fotógrafo del mismo periódico vespertino. A partir de ahí ha desarrollado una auténtica pasión personal y profesional por "el continente y el contenido" de su ciudad natal.

La apertura del Palacio de Carta está cada vez más cerca. Su rehabilitación y puesta en uso forma parte de la estrategia del alcalde Bermúdez de potenciar el protagonismo del turismo como factor generador de riqueza y empleo. Un primer paso importante.

"Este edificio resume la historia de Santa Cruz"

Carlos Pallés destaca que este monumento "resume en sí mismo la historia de Santa Cruz, sus aciertos y sus errores", por las transformaciones que sufrió el inmueble original, pero también porque "participó intensamente de la historia de la ciudad". El proyecto consistirá, en una primera fase, en acondicionar el uso de la primera planta, donde está el patio, que será accesible, algo que contempla en el Plan Director. Esta planta baja acogerá en breve un punto de información turística que gestionará la Sociedad de Desarrollo y un centro de visitantes para dar una primera explicación de la historia de Santa Cruz. La segunda fase será ya a medio plazo, financiada por varias administraciones, y con la idea de acondicionar el resto de plantas. Mostrará el pasado como un auténtico -y necesario- Museo de la Historia de la capital tinerfeña para alongarse al futuro con el turismo como eje.

El peso de la historia

El Palacio de Carta es un edificio que está situado en el número 8 de la plaza de la Candelaria. Se trata de uno de los inmuebles civiles más destacados del periodo barroco canario, si bien en su fachada, realizada en cantería, presenta elementos neoclásicos. Fue mandado a construir en 1721 para convertirse en la residencia familiar de la saga de los Carta y quedó terminado en 1752. En el interior, cuenta con dos patios de estilo tradicional canario. Fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC), lo construyó en el siglo XVIII el francés Francoise de la Pierre por orden del capitán de Infantería y primer alcalde electo de Santa Cruz de Tenerife, Matías Bernardo Rodríguez Carta.

Inmueble de "mil usos"

Proyectado para el ya mencionado uso residencial, albergó, además, la Capitanía General de Canarias (1853-1881) y el Gobierno Civil (1890-1927 con paso de 21 gobernadores). En 1945 fue adquirido y restaurado por el Banco Español de Crédito (Banesto), hasta que en 2007 pasó a la Consejería de Hacienda del Ejecutivo Autonómico, su propietaria hasta el momento. Luego, en agosto de 2015 el Ayuntamiento capitalino asumió su uso y gestión con el objetivo de destinarlo, en una primera fase, a centro de información turística y, después, a museo de la ciudad.