La mejora del contrato de Cristo González, cuya relación laboral con el Tenerife acabará en junio de 2018, sigue siendo el asunto pendiente que más se les está resistiendo a los dirigentes, que llevan meses intentando llegar a un acuerdo con los agentes del futbolista.

En la entidad blanquiazul esperan que el canterano haga carrera en el representativo o, de no ser así, no salir perdiendo en el apartado económico si el delantero prefiere cambiar de destino. En ambos casos, el Tenerife necesita que se produzca un entendimiento. Si nada cambia, Cristo podrá comprometerse con otro club a partir de enero de 2018 sin que llegue una compensación a las oficinas del Rodríguez López.

Víctor Pérez Borrego se refirió ayer al futuro de Cristo y confesó que no pierde la esperanza de que este asunto se resuelva de manera satisfactoria. "Se está retrasando un posible acuerdo", comentó el director general del Tenerife respecto a un proceso en el que se involucró desde su llegada al club, a finales del pasado verano. "Mientras las vías de diálogo no se hayan cerrado definitivamente, será posible un acercamiento y confiamos en que se pueda producir", añadió antes de apuntar que ese desenlace dependerá "de dos partes". Asimismo, advirtió de que "en algún momento habrá que poner fin a este proceso abierto, pero en este momento no hay nada que haga prever una ruptura definitiva ni que se hayan cerrado las puertas para un acuerdo".

Siendo casos muy diferentes, el Tenerife tampoco se ha asegurado la continuidad de José Luis Martí, aunque Pérez Borrego recordó que la "sintonía y la predisposición" que existe entre el club y su entrenador invitan a pensar que la renovación se firmará "en cualquier momento" de lo que queda de temporada. "No obstante, nos parece importante hacer las cosas con tranquilidad, discreción y sin interferir lo más mínimo en la faceta deportiva, que es lo más importante", manifestó haciendo alusión a la conveniencia de no distraer a ningún integrante de la plantilla en la fase final de la carrera hacia el ascenso.

Al ser consultado por los planes con Alfonso Serrano, habló en los mismos términos. Como Martí, el secretario técnico tiene contrato hasta el final de esta temporada. "Por razones obvias y por lo que suponen de estratégicas, estas decisiones le corresponden al consejo de administración, que está llevando con discreción y naturalidad el proceso", explicó.