He leído con fruición el libro del que es autor el prestigioso neurocirujano don Luis González Feria. El título, y la materia, es "El futuro incierto de la Sanidad". Había escuchado en la Real Academia de Medicina su disertación al respecto y me vi impelido a aprehender todo lo que en su ensayo había de poner negro sobre blanco. Y vaya si lo pone.

Como cita en el preámbulo, son ideas personales "fruto de más de cincuenta años de práctica médica". Años en los que, además, ha sido jefe del Servicio de Neurocirugía del Hospital Universitario de Canarias durante más de treinta; director médico de dicho centro durante otros seis, y consejero de Sanidad del Gobierno de Canarias que gestionó (sin éxito, como él dice) la transferencia de las competencias de Sanidad. Gestión, aquella, no exitosa porque, a pesar de preparar con su equipo un Plan Sanitario para Canarias tendente al beneficio de la mayoría de ciudadanos, al gobierno central parece que no le convenía políticamente la transferencia y suspendió unilateralmente las negociaciones. Y con acierto y dignidad el Sr. González Feria dimitió de su cargo de consejero.

En aquel tiempo, sus propios conocimientos se habían enriquecido con los aportados por su equipo y expertos suecos en planificación sanitaria. Estos buenos expertos ya le anunciaban que la Sanidad pública estatal, con lo parámetros de entonces, no era sostenible. Y el sistema sanitario ha seguido desarrollándose en diversos sentidos: más incorporación tecnológica e informática; más capacidad de diagnóstico; más demanda asistencial; deficiente relación emocional entre el paciente y su médico de asistencia primaria, hoy llamado "médico de familia", que ni conoce a la familia ni casi conoce al paciente porque cuando pudiera estar aproximándose a aquel objetivo, el sistema lo manda a otro centro de salud y pone un sustituto a tiempo parcial y... vuelta a empezar.

Me hizo sonreír el calificativo que le dio al desarrollo de la Sanidad, corriendo el año 2001, en una conferencia en la Universidad de La Laguna con motivo del acto de clausura de la 28ª Promoción de la Facultad de Medicina: "Insuficiencia Sanitaria Crónica y Progresiva". Estamos en 2017. El tiempo le ha dado la razón. Los recursos y la eficiencia no se compadecen con la deformación de la pirámide demográfica; las listas de espera crecen y crecen; pruebas diagnósticas que te las citan para más de un año; intervenciones quirúrgicas que no llegan y que dan lugar a que llegue antes el sacerdote con la extremaunción si el paciente es creyente.

Ciertamente, un texto para ser leído por quienes tiene competencia en la materia; y aun por el ciudadano común para que sepamos lo que tenemos entre manos y hacia dónde podemos ir.