La empleada de la Comunidad de Madrid Julia López Valladares ha testificado hoy en el juicio del caso Gürtel que vio facturas caras y con defectos de empresas de la trama, fuera de contrato y firmadas por su exjefe, el acusado Alberto López Viejo, que era viceconsejero de Presidencia.

La Audiencia Nacional ha reanudado el juicio de este caso de corrupción con la declaración como testigo de López Valladares, contratada laboral de la Comunidad de Madrid que trabajó para el servicio de Régimen Interior de Vicepresidencia Primera y Portavocía de la Consejería de Presidencia.

En concreto ha sido preguntada por la fiscal por dos contratos que la Comunidad de Madrid firmó con empresas de la trama Gürtel liderada por el acusado Francisco Correa en la época en la que era viceconsejero de Presidencia Alberto López Viejo, entre 2004 y 2007, y por facturas que éste firmó fuera de los mismos a empresas del mismo grupo.

La testigo ha recordado que cuando Esperanza Aguirre -que está citada como testigo para el jueves- asumió la Presidencia del Gobierno regional en sustitución de Alberto Ruiz-Gallardón se incrementaron los actos institucionales y de otro tipo para "loar la gestión del Gobierno" lo que coincidió con el "barullo" de las facturas.

"La presidenta iba a dos o tres actos al día; cuando estaba Gallardón había dos al mes o menos", ha recordado.

Ha explicado que la Comunidad firmó dos contratos con empresas de Gürtel para el montaje de eventos, uno por 360.000 euros para 68 actos en doce meses de los que finalmente solo se celebraron seis porque, según ha dicho, se calcularon mal los costes, y otro por 565.000 euros por quince meses para nueve actos.

Además ha añadido que López Viejo firmó facturas a empresas relacionadas con el grupo Gürtel como contratos menores por servicios fuera de los recogidos en los concursos.

Ha recordado que tuvo que pedir aclaraciones de facturas que mezclaban servicios recogidos en contrato y fuera del mismo y que contenían otras disfunciones. "Todas las facturas tenían incidencias", ha apostillado.

Respecto a las facturas por servicios fuera del contrato adjudicado por concurso desconoce por qué siempre se recurría a las mismas empresas a pesar de que eran caras y sus facturas contenían defectos formales.

"Yo era un dique para esas facturas que venían mal porque chocaban conmigo y con las normas, y si no el dique habría estado en la Intervención", ha dicho Julia López Valladares a preguntas de la abogada de Alberto López Viejo, aunque ha precisado que no la presionaron para cometer irregularidades.

La testigo ha dicho que tampoco sabe por qué López Viejo siguió haciéndose cargo de los actos de la presidenta regional cuando fue nombrado consejero de Deportes pero ha comentado: "Por suerte no volvimos a tener noticias de este tema".