Los Presupuestos Generales del Estado (PGE) deben recoger el "espíritu reformista" ausente en los últimos cuatro años, necesario para que España pueda avanzar en la buena dirección, como es con una reforma integral tributaria, una reforma laboral o mayor inversión en infraestructuras e innovación.

Así lo ha expresado el exministro y vicepresidente del Círculo de Empresarios, Josep Piqué, esta mañana en la presentación de un documento bajo el nombre ''PGE:2017: La situación política deja a la espera un nuevo impulso reformista'', en el que el círculo analiza el proyecto de presupuestos presentado por el Gobierno.

De esta forma, Piqué ha insistido en la importancia de una reforma integral del sistema fiscal, debido a su actual "falta de efectividad", especialmente a través de la ampliación de las bases imponibles y no con aumentos de tipos impositivos.

Asimismo, desde esta institución creen recurrente que la recaudación tributaria alcance el 40% del PIB (Producto Interior Bruto), y no el 38% donde se sitúa actualmente.

En este sentido, Piqué hizo hincapié en las cotizaciones a la Seguridad Social, para las que el Gobierno ha apelado al Fondo de Reserva a través de una operación de endeudamiento de más de 10.000 millones de euros y que califica de vía "válida coyunturalmente, pero no a largo plazo".

Por esto, entre otros aspectos, el Círculo propone reducir la carga sobre el empleador y avanzar hacia un esquema contributivo de reparto más equilibrado que garantice la sostenibilidad futura del sistema de pensiones.

Por otro lado, el Círculo de Empresarios cree que el contexto actual exige reformas en el ámbito educativo y laboral, así como un mejor diseño de políticas activas de empleo.

SIMPLIFICAR LA CONTRATACIÓN

De esta manera, por el lado del empleo, propone mayor simplicidad del sistema de contratación, equiparación de las indemnizaciones por terminación de los contratos temporales e indefinidos, establecer un sistema mixto de negociación colectiva y resideñar las políticas activas de empleo encaminadas a la transformación digital.

Por el lado de la educación, ve necesario el fomento de la reorientación profesisonal de jóvenes, reconocer la importancia de la labor de los profesores, promover el espíritu emprendedor e impulsar la Formación Profesional (FP) dual.

Por su parte, aunque los gastos estén "limitados" especialmente por las pensiones, el pago de intereses de deuda, las prestaciones por desempleo y los servicios de carácter general, que suponen tres cuartas partes de los PGE, desde el círculo creen necesario el aumento de inversiones en infraestructuras o innovación, partidas ligadas a la competitividad de la economía.

Así, aunque desde la institución ven positivo que el proyecto de presupuestos del Gobierno recoja un aumento del gasto en justicia, en sanidad y educación o en políticas de apoyo a la I? civil, les preocupa la reducción del apoyo a la internacionalización de las empresas o la inversión en infraestructuras del agua o medioambiente, así como para rehabilitación de edificios.

DÉFICIT PÚBLICO Y FISCAL

En este sentido, el margen de maniobra está limitado también debido al déficit estructural de la política fiscal del 3,8%, así como por el saldo fiscal primario, que presenta un déficit del 2% aproximadamente, lejos del superávit primario continuo del 1% que recomienda la OCDE, necesario para el mantenimiendo de los niveles de deuda pública tan elevados.

En cuanto a las previsiones económicas del Gobierno, aunque el Círculo califica de "conservadora" la previsión de crecimiento del PIB de un 2,5%, ven "excesivamente optimista" el crecimiento del 7,9% de la recaudación tributaria, no siendo posible lograr la cifra de más de 200.000 millones de euros.

De igual modo, tampoco apuestan por que se cumpla el déficit del 3,1% previsto para el conjunto de las Administraciones Públicas, ya que "dependerá de la recaudación real y de la evolución del déficit de la Seguridad Social", condicionado por el envejecimiento de la población, el desempleo y la mayor cuantía de la pensión media.