El coordinador general del PP, Fernando Martínez-Maíllo, ha defendido la actuación que ha tenido Génova en todo momento con Ignacio González, también cuando fue informada de su cuenta bancaria en Suiza, y ha advertido de que el PP "no es la policía". "Hicimos lo que teníamos que hacer", ha subrayado.

En una entrevista hoy con EFE, Maíllo (Zamora, 1969) asegura además que el PP "no teme" debatir sobre la corrupción y está "dando la cara", niega injerencias del Gobierno en la investigación del caso Lezo y garantiza que se ha actuado en todo momento con "pulcritud".

Prueba de ello, apostilla, es que "los supuestos culpables están en la cárcel", entre ellos González, a quien, como ha recordado el PP, ya ha expulsado provisionalmente del partido.

El "número tres" del PP recalca que su partido "actuó correctamente" cuando recibió información sobre Ignacio González y recuerda además que no había pruebas suficientes para denunciar al entonces presidente madrileño.

Ha defendido, asimismo, que la dirección nacional de entonces remitiera el asunto a Esperanza Aguirre, entonces presidenta de los "populares" madrileños, porque, según ha subrayado el PP, es un partido "jerarquizado pero también con organizaciones territoriales".

Y también ha considerado que se hizo lo correcto al hablar con González, quien "lo negó hasta la saciedad".

Maíllo rechaza además la idea de que Génova no hiciera lo suficiente cuando recibió esta información sobre González. "No somos la policía ni somos jueces para poder juzgar a nadie ni para llevar a nadie ante los tribunales cuando no existen pruebas y cuando además la persona (González) y la organización, en este caso el PP de Madrid, lo desmienten con rotundidad", ha dicho.

El coordinador general del PP ha asegurado que el presidente del Gobierno y líder del partido, Mariano Rajoy, de viaje estos días, ha estado al corriente de "todo lo que pasa" y ha hablado con él en varias ocasiones.

Los "populares", ha concluido, están "muy tranquilos" y "dando la cara" ante los ciudadanos, porque no tienen "nada que ocultar".

"No tememos al debate sobre la corrupción. Hacemos frente a la corrupción, la miramos a los ojos", ha dicho Maíllo, quien ha advertido de que el PP tampoco está dispuesto a que se haga una "causa general" contra la organización.

Además, ha dicho que, "si alguien piensa" que todo este asunto puede dañar la credibilidad del presidente, "igual se equivoca".

Una vez más, Fernando Martínez-Maíllo ha puesto en valor las medidas tomadas por el Gobierno de Rajoy para atajar la corrupción, del mismo modo que ha defendido la actuación del partido en todo momento.

Ha asegurado que se han mejorado los controles internos y ha anunciado en este sentido que en el próximo Comité Ejecutivo Nacional el PP aprobará la constitución de la Oficina del Cargo Popular y de las personas que compondrán este organismo autónomo del partido, incluido en los nuevos estatutos y que se va a dedicar precisamente a llevar dichos controles.

En cualquier caso, cree que es la administración la que tiene que poner "todos los controles necesarios" para evitar que un político tenga la tentación de "meter la mano en la caja", como supuestamente ha ocurrido, admite, en el caso de González.

"Lo que tenemos que hacer es dejar actuar a la justicia y denunciar cuando tenemos conocimiento de que alguna persona se ha salido de ese guión, como hizo concretamente el Gobierno con las tarjetas ''black'' o Cifuentes en este caso", ha dicho Maíllo, quien no obstante ha pedido que no se haga "tabla rasa con todo"

Por otra parte, ha considerado que el fiscal anticorrupción, Manuel Moix, está haciendo su trabajo "como todos los fiscales" y ha negado que existan injerencias del Gobierno en "ninguna actividad" del Ministerio Fiscal.

Tras lamentar que se estén filtrando grabaciones del caso Lezo cuando hay secreto de sumario, ha pedido además que no se "saquen las cosas de contexto" ni se busquen conclusiones en el mensaje que el ministro de Justicia, Rafael Catalá, envió a Ignacio González cuando éste le felicitó por su nombramiento.

"Nadie aguantaría que hicieran públicos nuestros propios mensajes, y menos descontextualizados; si viéramos los mensajes de Pablo Iglesias, igual también estaríamos alarmados, seguro", ha señalado.

En la entrevista con EFE, Maíllo habla también de la decisión del tribunal que juzga el caso Gürtel de llamar a declarar como testigo a Mariano Rajoy. Para el coordinador general del PP es "perfectamente compatible" que el PP haya criticado la decisión del tribunal con la disposición de Rajoy a acudir "con normalidad" a declarar.

Reconoce, en cualquier caso, que la imagen del presidente del Gobierno acudiendo como testigo a un juicio por corrupción "no es agradable".

Pero ha advertido de que Rajoy "ni tiene nada que ocultar ni nada que aportar", porque en 2003 no tenía ninguna responsabilidad sobre los hechos enjuiciados, como son la financiación de las campañas municipales en las localidades madrileñas de Majadahonda y Pozuelo.