La comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados ha instado al Gobierno a establecer un programa para eliminar de forma progresiva las sujeciones mecánicas en las residencias, geriátricos o centros de asistencia a personas con enfermedades mentales o neurodegenerativas.
Esta petición ha sido aprobada por unanimidad por la comisión y ha nacido a partir de una proposición no de ley de Ciudadanos, a la que se han sumado aportaciones del PP.
La enmienda transaccional que han alcanzado, y a la que han dado el visto bueno todos los grupos, insta al Gobierno a eliminar de forma paulatina las sujeciones mecánicas con incentivos para aquellas residencias o centros que apuesten por un sistema libre de sujeciones.
Con estos incentivos se priorizarán esas residencias en los conciertos o se mejorarán las condiciones económicas en las mismos.
También los diputados piden promover, mediante cambios en la normativa de edificación, reformas arquitectónicas y de mobiliario para disminuir la necesidad de sujeciones.
Además, tras el "acuerdo en el Consejo Interterritorial de Salud, y con respeto a las competencias de las comunidades autónomas" -tal y como ha pedido matizar la diputada María Torres, del PP-, se pide establecer un horizonte temporal para eliminar de los conciertos a entidades que no se hayan adherido a un programa de eliminación de sujeciones.
Pero lo que consideran prioritario los diputados es que se realicen los cambios normativos precisos para que se proceda a solicitar a todos estos centros a llevar un registro en el que se incluyan una serie de conceptos.
Entre ellos, el número total de pacientes, su estado mental, la cifra de los que tienen sujeción mecánica y la causa que lo motiva, medicación administrada y fecha y motivo de instauración, caídas sufridas por los residentes, número de fracturas, heridas y úlceras por decúbito y necesidad de alimentación forzada.
La comisión también reclama cambios legales para que sea obligatorio revisar de forma periódica "la necesidad o no de sujeción mecánica por parte de un facultativo del Sistema Nacional de Salud ajeno al centro y sin relación alguna con personal o propietarios que pudiera suponer conflicto de intereses.
Este profesional pertenecerá al centro de salud del área donde esté localizada la residencia o centro de asistencia del que se trate.
Ciudadanos, según ha dicho Francisco Igea, ha planteado la iniciativa porque experiencias en decenas de residencias con programas libres de sujeciones demuestran que "es posible cambiar esta práctica y cuidar a los ancianos y pacientes con demencia senil y alzheimer" sin ellas.
Pero se sigue haciendo, en su opinión, "por necesidades organizativas de los centros y por miedo", aunque debería dejar de hacerse porque "limita los derechos, la calidad de vida y la calidad de los ancianos".
Marta Sibina, de Unidos Podemos, ha mostrado su satisfacción por esta propuesta pero ha considerado necesario para su implantación fomentar la formación y el cambio de cultura de la práctica clínica para que se conciba la necesidad de eliminar las condiciones mecánicas.
También reclama que se incrementen los recursos de personal, una idea en la que ha coincidido el diputado socialista Luis Carlos Sahuquillo.