Así lo presentó Ana Rosa Quintana en su programa. Un tal Santiago González ha saltado a los medios de comunicación por valerse, todo lo que escribo es "presuntamente", de siniestras artimañas para recaudar dinero cuyo paradero es una incógnita. Treintañero de cuerpo cimbreante, este joven ha sido llevado ante la justicia por una presunta estafa que podría rondar los 70.000 euros, según cuenta el abogado de la acusación particular, Alberto Bacallado. No se le conoce profesión alguna, aunque si dedicación a la LGTB y aspiraciones como ser actor o saltar a la fama. Así lo atestiguan sus eróticas fotos en las redes sociales donde posa relajado y en pelota picada. Como si se tratara de un gurú, reclutaba a su entregado rebaño para luego, mediante desconocidas estratagemas, sacarle los cuartos.

Alardeaba, todo según su abogado, de ser subdirector del Centro Nacional de Inteligencia, de tener escoltas o de contar con helicópteros, un descomunal delirio para un personaje que siempre ha sido víctima del vacilón. Incluso llegó a ser candidato a la Alcaldía de La Matanza, para lo que parece que recaudó bastantes miles de euros. Cuando acudió al programa de Ana Rosa, y tras que un estafado se le acercase a maldecirlo, nuestro pobre protagonista cayó desmayado. Lo asombroso es que, según Telecinco, el desmayo le duró tres cuartos de hora, algo insólito. Y es que nuestra tierra no para de dar genios, porque ya me contarán si no, como podemos catalogar este tipo de flipada.

@JC_Alberto