Pedro Sánchez fue elegido ayer secretario general del Partido Socialista (PSOE) con el 50,2% de los votos –con el 99,19% escrutado– de los militantes en las primarias celebradas por esta formación política. Por detrás quedó Susana Díaz, con 59.030 (el 39,95%), y Patxi López, con 14.568 (el 9,85%).

El venceder de este proceso electoral afirmó que "hoy (por ayer) quien ha ganado" no ha sido él, sino el PSOE, agradeciendo a todos los militantes que con su voto hayan conseguido construir un partido "más creíble y más grande".

Aclamado por unos 200 militantes en el salón de actos de Ferraz al grito de "sí es sí", Sánchez compareció arropado por miembros de su equipo y diputados, a quienes les dio las "gracias de corazón" por su "ilusión y ejemplo". "Somos la vanguardia del sistema democrático y político en España", apuntó, y agradeció también el trabajo desarrollado por sus rivales, Susana Díaz y Patxi López.

Lo hizo mientras se escuchaban abucheos en la sala, pero él insistió en expresarlo porque los dos "son compañeros", señaló, y que "trabajan y han trabajado" por hacer un PSOE "más fuerte".

También se dirigió a los millones de personas que "se sienten progresistas" y no votaron al Partido Socialista para decirles que "aquí está el PSOE, está la izquierda".

Esta organización va a hacer una oposición "útil" en defensa de la mayoría social "hastiada de la corrupción" y que padece las desigualdades ocasionadas por los "recortes" del Partido Popular, manifestó Sánchez.

"Vamos a hacer lo indecible por acabar con corrupción del PP, por mejorar sus vidas y cambiar el rumbo del país", afirmó, e insistió en la idea de que ayer arrancó "el kilómetro cero de algo más importante". "Hoy empieza todo, no acaba nada", reflexionó.

El nuevo líder de los socialistas mantuvo que va a ser el secretario general "de cada uno" de los afiliados y que convertirá a la formación de la rosa "en el partido de la izquierda", en una organización nueva, coherente y "unida" para regenerar España.

Del mismo modo, se comprometió a que el Congreso de junio será un cónclave "en positivo" y que servirá "para unir" independientemente de la candidatura que haya votado cada uno.

Sus últimas palabras de esta intervención fueron de nuevo dirigidas a los que le han apoyado en este viaje por demostrar, dijo, que cuando "hay ganas, ilusión e ideas, todo es posible". Estas palabras fueron coreadas con gritos de "sí es sí".

Antes de que Pedro Sánchez hablara ante los medios, la imagen de la jornada llegó con la foto de familia que se hicieron los tres candidatos en la sede de Ferraz: él, muy sonriente y satisfecho frente a su principal rival, Susana Díaz, que posó ante los fotógrafos con gesto serio y que apenas fue capaz de esbozar una leve sonrisa tras el resultado.