La CEOE de Tenerife prevé un crecimiento de la economía canaria de un 2,9% en 2017, inferior en una décima a la media nacional, lo que supone un dato peor que en 2016, cuando se registró un incremento del PIB canario del 3,5%, que fue tres décimas por encima de la media española.

El peor comportamiento de la economía en 2017 se debe al agotamiento de los principales factores de crecimiento, como el bajo precio del petróleo, los estímulos monetarios del Banco Central Europeo y la inseguridad de los mercados turísticos competidores, así como por el aumento de las incertidumbres políticas externas e internas, según señala la CEOE tinerfeña en su informe de coyuntura del primer trimestre de este año.

En los tres primeros meses de este año, el crecimiento de la economía canaria sería del 0,6% respecto al trimestre anterior y de un 3,5% respecto al mismo trimestre del año 2016.

El turismo es el principal motor del crecimiento, junto a un crecimiento de la demanda interna, pero el saldo negativo del comercio exterior actúa como freno a la actividad económica, indica el informe empresarial.

La CEOE estima que el número de desempleados bajará en 25.000 personas y la tasa de paro se situará en torno al 22,75%, frente al 24,90% actual.

A lo largo del año, continuará la evolución positiva del turismo, aunque con menos vigor que en 2016, con una perspectiva de crecimiento del turismo extranjero del 5% y del 10% en el caso del turismo nacional.

El mercado británico comenzará a perder fuerza a partir de la campaña de verano por la devaluación de la libra generada por el Brexit, de acuerdo a la previsión de la CEOE.

El informe considera que la existencia de un presupuesto expansivo para Canarias en 2017, el impulso a la inversión del Fondo para el Desarrollo de Canarias (Fdcan) y la llegada de recursos del Estado impulsarán la economía por el lado de la demanda, por un impulso del gasto e inversión pública.

Sin embargo, el incremento del proteccionismo en Estados Unidos y el aumento del nacionalismo y del populismo en Europa afectará negativamente al comercio internacional y al crecimiento.

"La incertidumbre para el año 2017 alcanzará sus mayores cotas desde la crisis del euro de 2011-2012", advierte el informe empresarial.

La CEOE tinerfeña considera que la falta plena capacidad de actuación del Gobierno español para acometer reformas económicas incidirá en que la economía no pueda reaccionar "ante cualquier modificación del entorno que aconseje un cambio de rumbo".

Así, a corto y medio plazo la economía canaria seguirá basándose en la excelente coyuntura turística derivada de los problemas geopolíticos de los competidores, mientras se desarrollan otros sectores económicos como el cine, las reparaciones navales y la sociedad de la información.

"Desgraciadamente, la nueva ley del suelo sigue retrasándose, y sus efectos solo se dejarán sentir en el mejor de los casos en el segundo semestre de 2018", de acuerdo con el informe empresarial.