Hasta un 37,4 por ciento de la población en España considera que la legalización del cannabis serviría para solucionar el problema de las drogas, frente al 33,1 por ciento que lo pensaba en 2013, y hasta uno de cada cinco (21%) cree que la solución pasa por legalizar todas las sustancias.

Éste es uno de los datos de la última Encuesta sobre Alcohol y otras Drogas en España (EDADES) presentada esta semana por el Ministerio de Sanidad, en la que participaron 22.541 personas, que muestra un aumento de la población consumidora de cannabis con respecto a 2013 (9,5% en el último año) y cómo dicho consumo es muy superior entre los menores de 15 a 17 años (12,6%) que entre los mayores de 35 años (5,5%).

No obstante, el estudio muestra como la población más favorable a la legalización del cannabis son precisamente los mayores, sobre todo los que tienen entre 35 y 44 años (39%).

Asimismo, entre los consumidores de cannabis hasta el 61,8 por ciento están a favor de su legalización, en especial quienes se consideran problemáticos, ya que hasta un 68 por ciento ven positiva la medida.

Pese a este respaldo a la legalización del cannabis, la población española considera que hay otras medidas más importantes para acabar con el problema de las drogas, tales como la educación en las escuelas (90,8%), el tratamiento voluntario a consumidores (83,8%), las campañas publicitarias (80,7%) y el control policial y aduanero (80,4%).

El estudio también refleja una disminución del riesgo que la población atribuye al consumo de esta sustancia una o más veces por semana, ya que el 79,8 por ciento cree que puede causar muchos o bastantes problemas, cuando en 2013 lo pensaba así el 82,4 por ciento de los encuestados.

En el caso del alcohol, menos de la mitad de la población (45,8%) atribuye bastante o muchos problemas al consumo de 5 o 6 cañas o copas en el fin de semana, mientras que en cambio persiste una elevada percepción del riesgo (91,6%) para el consumo de un paquete diario de tabaco.

UN PORRO EN 24 HORAS

En cuanto a la disponibilidad de las sustancias, se confirma la tendencia descendente iniciada en 2009 para todas ellas, excluyendo el tabaco y el alcohol dado que son legales.

En ese sentido, la droga ilegal más accesible es el cannabis y hasta el 64,3 por ciento de la población cree que la podría obtener en 24 horas fácil o muy fácilmente. En el caso de la cocaína, algo más del 40 por ciento también ve fácil conseguirla.

De igual modo, la visibilidad social de las drogas también continúa la tendencia descendente en todas las situaciones planteadas en la encuesta, pero pese a ello hasta el 45,1 por ciento de la población considera frecuente o muy frecuente ver a personas fumando porros, más que haciendo botellón (34,9%).