España es el mejor país del mundo para nacer por su alto nivel de bienestar y salud, según el ''Índice de Progreso Social'', más allá del PIB, publicado este jueves 22 de junio, y realizado por Deloitte y Social Progress Imperative (SPI), que examina a 128 países, en base a 50 categorías.

En la cuarta edición de este informe, España ocupa el 16º lugar del ranking mundial, escalando un puesto con respecto al año anterior y situándose justo debajo de Bélgica y por delante de Japón.

"El progreso social es la capacidad de una sociedad de satisfacer las necesidades humanas fundamentales de sus ciudadanos, de establecer cimientos que permitan mejorar y mantener la calidad de vida de sus ciudadanos y comunidades, y de crear las condiciones para que todos los individuos alcancen su pleno potencial", indica el documento.

Según sus autores, esta posición de España se debe a las altas puntuaciones obtenidas en tres categorías en particular: la salud y el bienestar, donde ocupa el primer puesto del mundo; la calidad medioambiental (tercer puesto), solo por detrás de Suiza y Suecia, y el acceso a los conocimientos básicos, donde logra la cuarta posición mundial.

Para elaborar este índice, se tienen en cuenta cincuenta indicadores, agrupados en tres grandes pilares: las necesidades humanas básicas, los fundamentos del bienestar y las oportunidades que cada país ofrece a sus ciudadanos.

España ha escalado progresivamente puestos en los últimos tres años y es, junto con Japón y Noruega, el país que más ha aumentado su puntuación total y, por tanto, el que más ha mejorado en los últimos años. El informa señala a los tres países como "buenos ejemplos de cómo alcanzar progreso social a pesar de los retos económicos y políticos".

Según sus autores este resultado de España es consecuencia de la mejora en ''métricas críticas'', donde había insuficiencias como la libertad personal --elegir religión, tomar anticonceptivos o decidir la edad para casarse--; la tolerancia y la inclusión --hacia la religión, inmigrantes, colectivo homosexual y minorías--; o la calidad medioambiental --polución del aire, depuración de aguas o emisión de gases de efecto invernadero--.

Además del ranking, Deloitte y Social Progress Imperative establecen los doce "mejores sitios para nacer" atendiendo a las categorías que conforman los 3 pilares en los que se sustenta el ranking. España es, según el SPI, el mejor país para nacer en materia de salud y bienestar, un área en el que computan factores como la esperanza de vida a los 60 años, muerte prematura por enfermedades no trasmisibles o la tasa de suicidio.

Las puntuaciones más elevadas en la clasificación global las ocupan los países nórdicos --salvo Suecia, que cae a la octava posición-- con Dinamarca a la cabeza liderando la clasificación este año, arrebatándole el primer puesto a Finlandia, que queda en segundo lugar.

Islandia, Noruega, Suiza y Canadá ocupan los siguientes puestos. España es el décimo país de la Unión Europea en entrar en el ranking, superado por Bélgica, Alemania, Reino Unido e Irlanda entre otros, pero por delante de sus vecinos Francia, Portugal e Italia.