Los Mossos d''Esquadra detuvieron ayer al cuñado del hombre hallado muerto en el maletero de un coche que llevaba aparcado desde el lunes en la calle Béjar del barrio de Hostafrancs de Barcelona, por su supuesta vinculación con el crimen.

Según informaron fuentes de la investigación, la familia del fallecido denunció el pasado martes en Lleida que el hombre había desaparecido el pasado lunes por lo que los Mossos d''Esquadra montaron un dispositivo para buscarle.

No obstante, las gestiones para localizar al desaparecido fueron infructuosas, hasta que un vecino del barrio de Hostafrancs llamó en la mañana de ayer a los Mossos d''Esquadra para advertir de que un vehículo que llevaba al menos desde el lunes aparcado frente a su restaurante desprendía un fuerte hedor y que del maletero salía un líquido rojizo.

En declaraciones a los periodistas, el dueño de este restaurante explicó que el vehículo, de la marca Volkswagen, de color negro y comprado en un concesionario de Lleida, llevaba al menos desde el lunes estacionado en el mismo lugar, ya que tenía una multa con fecha 19 de junio.

En un comunicado, los Mossos d''Esquadra explicaron que hacia las 12:00 horas del mediodía recibieron la alerta de que el vehículo desprendía un fuerte olor, por lo que agentes de la policía catalana se dirigieron al lugar.

Cuando los agentes llegaron a la calle Béjar, han constatado que había el cadáver de un hombre en el interior del vehículo, con signos de criminalidad. Tras comprobar la identidad del fallecido, los Mossos d''Esquadra detuvieron a su cuñado, de 47 años de edad, por su supuesta vinculación con el crimen.