Un terremoto de magnitud 5,9 sacudió hoy la región central del archipiélago de Filipinas, sin que se informara de víctimas ni daños materiales de importancia, cuatro días después de que otro sismo dejara dos muertos y 72 heridos.

El movimiento telúrico se situó a 6,1 kilómetros al oeste de San Pedro y a 13,3 kilómetros al oeste de Burauen, ambas en la provincia de Leyte, informó el Servicio Geológico de Estados Unidos, que mide la actividad sísmica en el mundo.

El sismo tuvo una profundidad de 12 kilómetros en el epicentro, sin que se declarara alerta de tsunami.

El 6 de julio, un terremoto de magnitud 6,5 provocó la muerte de una filipina de 19 años en Ormoc y a un filipino de 40 en Kananga, de acuerdo con el Consejo Nacional de Gestión y Reducción de Amenaza de Desastres, la agencia estatal que canaliza la información oficial de las catástrofes.

El organismo también informó de 72 heridos (43 en Kananga, 26 en Carigara y 3 en Ormoc).

Filipinas se asienta sobre el llamado "Anillo de Fuego del Pacifico", un área de gran actividad sísmica y volcánica que es sacudida por unos 7.000 temblores al año, la mayoría moderados.