La asociación de consumidores Adicae ha calificado de "intento de engaño manifiesto" la propuesta del Banco Santander para que los clientes y empleados del Banco Popular que acudieron a la ampliación de capital de la entidad el pasado verano puedan recuperar su inversión.

El Banco Santander ha comunicado que ofrecerá a los clientes minoristas, ya sea particulares o empresas, que invirtieron menos de 100.000 euros y adquirieron acciones de Popular entre el 26 de mayo y el 21 de junio de 2016 o determinadas obligaciones subordinadas, la posibilidad de recuperar su inversión siempre que renuncien a emprender acciones legales.

Para ello el Banco Santander emitirá "bonos de fidelización" -obligaciones perpetuas emitidas por la entidad- con una rentabilidad del 1 % anual que se podrán amortizar a partir del séptimo año a voluntad de la propia entidad y con el visto bueno previo del BCE.

Para Adicae, la propuesta constituye un "abuso flagrante", dado que solo afectará a un escaso 10 % de los pequeños accionistas afectados, y no supone reembolso de cantidad alguna, ya que las acciones o deuda subordinada se canjean por deuda perpetua, amortizable a voluntad del banco.

Esta asociación exige que cualquier solución debe ser universal e ir dirigida a las más de 300.000 familias afectadas por la venta del Popular al Banco Santander, "sin inducir a nuevos engaños ni abocar a los afectados a la titularidad de nuevos productos complejos y de alto riesgo".

En sentido parecido se ha pronunciado Juan Ignacio Navas, socio-director de Navas & Cusí, que ha señalado en una nota que la oferta del Santander no es una compensación, sino un intento de retener a la clientela, y excluye a la mayor parte de los pequeños accionistas y obligacionistas a los que no ha dejado otro camino que la reclamación judicial.

En su opinión, mediante estos ''bonos de fidelización'' el Santander reconoce implícitamente su responsabilidad en el Banco Popular.