Dos puntos de encuentro y otras tantas decepciones. Esta es la visión que tienen los vecinos, usuarios y amigos de la naturaleza que emplean las mañanas, pero sobre todo las tardes, en pasear por los caminos de El Ortigal, la Cruz Chica o Guamasa para disfrutar del entorno rústico que ofrecen estos puntos privilegiados. ¿Pero realmente esto es así? La respuesta es sencilla: no.

No porque la existencia de puntos negros en estos parajes son desgraciadamente más normales de lo que parece. Es el caso de la vereda El Majano o el camino Las Monjas, en donde existen verdaderos vertederos ilegales que afean un entorno tan privilegiado y rústico como la zona de la Cruz Chica o El Ortigal, tal y como denuncian los vecinos, que ya están más que hartos de que la gente sea tan incívica.

A mitad de la vereda El Majano el panorama es desolador. Se trata de una parte del camino que no está en condiciones de ser transitado por vehículos, pero aún así algún camión ha dejado sus miserias en uno de los laterales. Allí duermen desde escombros de obras hasta neveras y otros enseres e incluso planchas de uralita.

En este caso, los vecinos reconocen estar cansados de la situación, "son incívicos que se aprovechan de la oscuridad para echar toda su porquería aquí. Es habitual que dejan aquí todo este escombro o todos los electrodomésticos que ya no les sirven", se queja uno de ellos.

Señalan que la situación "la llevamos soportando desde hace años sin que nadie haga nada. Esto era una zona de invernaderos y de huertas por cada uno de los lados muchos años atrás. Lo que deberían hacer es cortar el camino por este lado y por este otro (desde camino Alfredo Hernández Canino hasta el cruce de El Majano con el camino Santa Ana) y así se evitaría que sigan tirando cosas aquí", explicaron con vehemencia.

Lo mismo ocurre en el camino Las Monjas, paralelo a Santa Ana. En su prolongación hay otro punto negro donde existe desde un depósito de vegetales ilegal (hay varios troncos de palmera canaria, que está protegida) a otra escombrera de obras durante un tramo de unos 20 metros continuos. "Es lo que tiene que el camino esté medio asfaltado hasta este punto", señaló otro vecino de la Cruz Chica tras ser consultado.

"Habitualmente paso por aquí con mis amigas y ya no nos sorprendemos de la porquería que vemos a diario. Lo que sí hemos hecho es denunciarlo al ayuntamiento y no pasa nada. Es lo que hay", dicen con resignación.

Todos los consultados critican que los incívicos no utilicen el servicio gratuito de recogida de enseres y electrodomésticos y escombros que pone el ayuntamiento a disposición de los vecinos.

Dicha denuncia también ha llegado directamente al grupo de Unid@s Se Puede (USP) en La Laguna, que ha reclamado a la corporación que tome cartas en el asunto y desarrolle medidas correctoras.