El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció hoy que la empresa taiwanesa Foxconn, suministradora de Apple, invertirá 10.000 millones de dólares en EEUU y construirá una planta en Wisconsin que generará de entrada 3.000 empleos.

"Es un gran día para los trabajadores estadounidenses, y para todos aquellos que creen en la etiqueta ''Hecho en EEUU''", anunció Trump en un acto en la Casa Blanca, en el que estuvo acompañado por el presidente de la empresa, Terry Gou; el vicepresidente estadounidense, Mike Pence; y el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, entre otros.

Según el mandatario, esta inversión de Foxconn tiene el potencial "de generar con el tiempo hasta 13.000 empleos".

Trump ha situado como prioridad de su agenda el nacionalismo económico, con el lema "Hacer a EEUU grande de nuevo", y prometido impulsar la creación de empleo en el país.

"Si yo no hubiese sido elegido, (Gou) obviamente no estaría gastando 10.000 millones de dólares", subrayó el presidente estadounidense en una breve intervención.

Por su parte, Ryan, que representa al estado del medio oeste en el Congreso, afirmó que "este es un día emocionante para nuestra comunidad, y deseamos trabajar más con Foxconn a medida que comenzamos esta nueva era de manufactura en Wisconsin".

La fábrica que Foxconn instalará en Estados Unidos estará dedicada a la manufactura de pantallas, empaquetado de semiconductores y componentes y productos ligados a la tecnologías de grandes datos y computación en la nube.

Foxconn es la fabricante de los principales dispositivos de Apple, entre ellos el popular iPhone, y cuenta con más de un millón de empleados en China.