El internacional ghanés Kevin-Prince Boateng aseguró que abandona la UD Las Palmas porque ha querido dar prioridad a su familia, que reside en Italia, en una inesperada y sorprendente decisión que anunció ayer el club amarillo.

Boateng ofreció una rueda de prensa en castellano en la que dijo que era un día "muy difícil" para él, que echa mucho de menos a su familia, y que la decisión "no es futbolística", sino del "Boateng padre", porque quiere estar cerca de su hijo y su esposa, la modelo y presentadora Melissa Satta.

El jugador alemán explicó que su familia vive en Milán, pero la lejanía con Gran Canaria no es la distancia en kilómetros, sino "de emociones, de sentimientos", y por eso ha tomado esta decisión.

El futbolista se emocionó al referirse al comportamiento que ha tenido con su persona el presidente del club, Miguel Ángel Ramírez, porque en todo momento se ha preocupado por su situación y le ha dado todo tipo de facilidades. "Es como un padre para mí", dijo.

Prince, incluso, no descartó "volver algún día" a Las Palmas.

Por su parte, Ramírez se refirió a Prince como "el jugador más importante que ha pasado por la historia de la UD Las Palmas.

El presidente aclaró que el jugador rescinde los tres años firmados "sin coste alguno para el club", y aseguró que no buscarán un recambio en el mercado para la posición de delantero centro.